Jesús Posada recibe la medalla del Congreso de la mano del rey Felipe VI

La Presidencia del Congreso de los Diputados, tercera autoridad del Estado, es una magistratura donde son "tan importantes son sus potestades y competencias como las virtudes con las que se ejerce". Con estas palabras, Su Majestad el Rey ha definido el papel de la Presidencia de la institución durante su discurso en el acto de imposición de la Medalla del Congreso a todos los presidentes desde la Constituyente hasta la XII Legislatura, que se ha celebrado en el Palacio del Congreso.

El Salón de los Pasos perdidos ha acogido este solemne acto de imposición de las medallas, que ha servido como homenaje a todos los que han ostentado la Presidencia de la Cámara Baja desde 1977, y que ha sido presidido por Su Majestad el Rey, quien ha hecho entrega de las insignias acompañado de la presidenta del Congreso, Meritxell Batet. También han asistido altas autoridades del Estado y familiares de los condecorados.

En primer lugar han recibido las medallas los familiares de los presidentes fallecidos. En representación del presidente del Congreso de la Legislatura Constituyente, Fernando Álvarez de Miranda, ha recogido la medalla su hijo Ramón Álvarez de Miranda. Y en nombre del presidente de las Cortes durante la Legislatura Constituyente, Antonio Hernández Gil, lo ha hecho su hija Guadalupe Henández Gil.

Por su parte, la medalla del presidente del Congreso de la I Legislatura, Landelino Lavilla, ha sido recogida por su hijo Juan José Lavilla. La condecoración del presidente de la II Legislatura, Gregorio Peces-Barba, se ha entregado a su hijo Antonio Peces-Barba. En nombre de Félix Pons, presidente del Congreso en las legislaturas III, IV y V, ha recogido la condecoración su hija Celia Pons. Y en el de Manuel Marín, presidente durante la VIII Legislatura, lo ha hecho su viuda, Carmen Ortíz.

A continuación, el jefe del Estado ha impuesto la medalla a los expresidentes presentes en el acto: Federico Trillo-Figueroa, presidente del Congreso en la VI Legislatura; Luisa Fernanda Rudi, presidenta en la VII Legislatura; el presidente de la IX Legislatura, José Bono, el presidente de la Cámara Baja durante la X Legislatura, Jesús Posada; Patxi López, presidente en la XI Legislatura, y la presidenta del Congreso en la XII Legislatura, Ana Pastor.

Concluida la entrega e imposición de las medallas a los condecorados han tomado la palabra los expresidentes presentes en el acto. Jesús Posada, presidente del Congreso de los Diputados en la X Legislatura (2011-2016), ha señalado que su objetivo durante unos "años de mayoría absoluta" fue que "la oposición pudiera manifestar adecuadamente sus propuestas" y que "pudieran visualizarlas", porque se trataba de que el Congreso de los Diputados fuera un "reflejo de las distintas opiniones de España". También ha destacado durante sus palabras que para él fue un inmenso honor proclamar Rey a Su Majestad Felipe VI en la solemne sesión de proclamación el 19 de junio de 2014.

"La imagen visible de una institución central del Estado"

Concluidas las intervenciones de los presidentes de la Cámara, ha tomado la palabra la presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet. Con su discurso ha dado la palabra a los presidentes fallecidos, con referencias a intervenciones parlamentarias pronunciadas por Antonio Hernández Gil, Fernando Álvarez de Miranda, Landelino Lavilla, Gregorio Peces-Barba, Félix Pons y Manuel Marín.

La presidenta del Congreso ha destacado que "en democracia todos cuentan y cuentan en igualdad" y que las instituciones democráticas son "garantía de libertad". Sobre la Presidencia de la Cámara ha señalado que cada uno con su actuación "ha dado identidad a cada legislatura" y "ha contribuido a formar la imagen" del Parlamento. También ha apuntado que  es un día importante para la democracia y para el órgano representativo, su pieza fundamental, que representa el pluralismo político y "donde a través del diálogo y el debate razonado se deben alcanzar los acuerdos para el progreso de todos".

Por último, ha tomado la palabra Su Majestad el Rey, quien durante su intervención ha destacado que hace pocos días se cumplió el aniversario de las elecciones del 15 de junio de 1977, inicio de una "etapa democrática histórica incomparable en términos de libertad, estabilidad, progreso y bienestar". Y ha distinguido y valorado "el trabajo, esfuerzo y determinación de todos los expresidentes, desde los que estuvieron en aquel excepcional comienzo, hasta los que continuaron trazando y fortaleciendo el cambio del parlamentarismo hasta nuestros días".

A ellos también ha agradecido su labor ejerciendo la "imagen visible de una institución central de nuestro Estado social y democrático de Derecho". Y ha concluido su intervención recordando que el vínculo entre la Corona y el Parlamento se consagra en momentos como su jura de la Constitución como Príncipe de Asturias así como su proclamación como Rey, un vínculo que "volveremos a vivir con la Princesa Leonor ante su mayoría de edad".