Agraria
De purín a biogás para tractores agrícolas
Copiso y la UVa demuestran en Sauquillo la aplicación del biocombustible en el sector
La cooperativa Copiso va a realizar mañana viernes una demostración práctica de los resultados del proyecto Life Smart AgroMobility, que tiene como objetivo transformar el purín en biogás para combustible de vehículos, en la granja de Sauquillo de Boñices donde se está desarrollando, desde que arrancó, en octubre de 2020. Junto con Copiso participa la Universidad de Valladolid y otras cinco entidades de España y Bélgica que forman parte del consorcio responsable de su desarrollo.
Tras visitar las instalaciones se probará el gas obtenido en la granja como combustible, que se cargará en el depósito de un tractor para que realice trabajos agrícolas. El objetivo es que los ganaderos y agricultores de la provincia conozcan esta tecnología y sus posibilidades porque permitirá demostrar que es posible la utilización de los purines de las explotaciones de porcino como biocomustibles de carácter renovable en vehículos para labores ganaderas y agrícolas. Además, generará fertilizantes con mayor utilidad que el purín y el ahorro de 730 toneladas de CO2 al año.
El proyecto se está llevando a cabo en la explotación de Sauquillo con 3.500 cabezas de ganado, propiedad de Copiso, donde se ha dispuesto de un digestor anaerobio para producir el biogás, que los investigadores transformarán en biometano en una planta de tratamiento, basada. a su vez, en un proceso biológico con microalgas. También se dotará a la instalación de una gasinera, es decir, una estación de repostaje para vehículos propulsados con metano.
El profesor de departamento de Ingeniería Química y Tecnológica del Medio Ambiente de la Escuela de Ingeniería Agraria del Campus Duques de Soria, Ignacio de Godos Crespo, explica que el proyecto demostrará que mitiga el efecto invernadero, ya que por una parte, se reducen las emisiones de CO2, CH4 y N2O desde las balsas de contención de purin de cerdo y por otra se genera un biocombustible de carácter renovable. «El resultado final del proyecto permitirá que Copiso cuente con estas instalaciones y dos vehículos impulsados con biometano. La idea es que la cooperativa sea beneficiara final del combustible limpio que hemos generado y que se pueda extrapolar a otras granjas», incide. Así, «el producto final que crearemos es que generamos combustible, es decir, en vez de consumir gasóleo, las granjas consumirán biometano», precisa. De este modo, se concibe a las explotaciones porcinas no solo como instalaciones de producción de alimentos sino también productoras de bionergía en forma de combustible.
El programa Life de la Unión Europea es contribuir al desarrollo sostenible; y el proyecto Smart AgroMobility se encuadra dentro del área prioritaria ‘Mitigación del Cambio Climático’ del Subprograma Acción por el Clima. La Comisión Europea aportó, a través del Life, 2.290.000 euros a los promotores de este proyecto piloto.