El PP ve falta de transparencia en el PSOE con la quinta planta del edificio de Pajaritos

La situación del edificio de Pajaritos II parece encaminarse a ser uno de los asuntos que marcarán el inicio del curso político en el Ayuntamiento de Soria. El grupo municipal del PP aseguró ayer que a pesar de haberlo solicitado tras la toma de posesión, aún no ha recibido los documentos que forman parte del expediente. La portavoz popular lamenta la «falta de transparencia» del equipo de Gobierno y reconoce su «preocupación» tanto por los afectados como por el «precedente» que puede crear la resolución de este caso.

Esta misma semana un grupo de propietarios de las viviendas mostraban su indignación tanto con la promotora del complejo, Domus Nebrija, como con el Ayuntamiento de Soria, por la falta de explicaciones sobre el estado de la construcción y su futuro. Desde el PP de Soria comparten esa queja y consideran que desde el Ayuntamiento no se han dado las oportunas explicaciones sobre todos los aspectos aún pendientes sobre este edificio como el expediente de derribo, el expediente sancionador o la elevación a definitiva de la modificación urbanística.

La portavoz del PP, Belén Izquierdo, tal y como hizo durante la pasada campaña, considera que se trata de una asunto «grave» y no está de acuerdo con las palabras del alcalde, Carlos Martínez, que anunció el fin de la polémica cuando se emitió la orden de derribo. Una vez que el nuevo grupo popular tomó posesión de sus cargos, Izquierdo asegura que se solicitó al equipo de Gobierno acceso al expediente –entre finales de junio y principios de julio– y que la petición volvió a reiterarse en el mes de agosto. A pesar de coincidir con el periodo vacacional, desde el PP consideran que ha existido tiempo suficiente para tener acceso a la información. «Hasta ahora lo único que nos han remitido es un documento donde efectivamente se nos da acceso al expediente, pero aún no nos han facilitado la información», lamentó.

«Lo que conocemos hasta la fecha es que la permuta sí ha salido adelante, pero el derribo aún no se ha cumplido, todavía se puede ver la quinta planta perfectamente, no sabemos nada de la sanción y quedan por resolver las alegaciones a la modificación», apuntó Izquierdo. «Nosotros estamos a la espera», insistió.

La portavoz popular asegura que está preocupada en un doble sentido. «Me preocupan las familias que no tienen ninguna culpa en lo que ha pasado y ya se están dando situaciones complicadas», explicó añadiendo que «me preocupa también a nivel urbanístico en el sentido de que en función de la resolución esto puede crear un precedente muy peligro y algunos vean que el beneficio es mayor que la pérdida», advirtió.

En una de las primeras acciones nada más comenzar la legislatura, el PP municipal ya planteó un extenso escrito de alegaciones contra la modificación urbanística número 32 que viene a permitir una altura más en la zona de Pajaritos II y que se aprobó en el plano del 20 de marzo. En sus alegaciones el PP reclama la «nulidad» de la modificación.

La principal justificación que plantea el PP para revertir el cambio urbanístico aprobado por el Pleno es que «no puede tramitarse una modificación puntual sobre un documento técnicos que obvia la situación actual de la modificación existente, constando expresamente que no hay edificaciones». Este argumento ya se utilizó en el Pleno y básicamente pone de manifiesto que el informe que avala la modificación dice que no hay construcciones cuando en la parcela hay un edificio completo y con una planta más de lo permitido.

En ese mismo escrito, el PP denunciaba que la obra comenzó «al menos» y a tenor de la documentación existente, en el mes de mayo de 2021. Las pruebas aportadas por el PP derivan de las quejas de vecinos de la zona por la suciedad generada por las obras. Sobre esas quejas hay una orden de ejecución de limpieza emanada de Alcaldía en julio de 2021, según el escrito del PP. Hay que tener en cuenta que la licencia de obras se concedió en agosto de 2020, pero sin la posibilidad de iniciar las obras por la falta de documentación como el aval bancario.

Desde el PP consideran que la nulidad de la modificación puntual planteada y aprobada debe ser nulo porque «no se realiza con un real interés general, sino por los intereses particulares de la promotora, como así consta en la justificación, eliminando medianeras, edificabilidad en la parcela municipal –que ha sido objeto de una permuta– y viviendas en las mismas dándoselas racionalmente al edificio colindante, de propiedad privada».