Los fotógrafos aspiran a que el Centro Nacional de Soria aglutine una red

Hace casi un año, el sector de la fotografía y la imagen asistió al lanzamiento del Banco de España como futuro Centro Nacional de Fotografía. Desde entonces, la entidad ya está constituida gracias a un Real Decreto y el Ministerio de Cultura trabaja en un plan de necesidades y espacios. La antigua sede del banco central en la plaza de las Mujeres volvió ayer a acoger a una amplia representación del sector, en una visita a raíz del Encuentro Nacional de Festivales de Fotografía. El mundo de la imagen espera que la institución aglutine los diferentes esfuerzos en la promoción de esta cultura, de manera que puedan trabajar en red. Tal es uno de los fines que sostiene la Plataforma por el Centro Nacional de Fotografía que, con más de 7.000 miembros, une a todos los premios nacionales vivos.

Para esta labor, es necesario identificar el «quién a nivel de lo fotográfico en este país», porque «este Centro para nosotros llega tarde, ante esa ausencia institucional la gente ha trabajado», señaló Sandra Maunac, por parte de la Plataforma. «A lo largo y tendido de la Península, lo que existe son instituciones, fundaciones, colectivos, escuelas, librerías, galerías, que lo que hacen es promover y difundir la cultura de la imagen y la fotografía», explicó. Estos son los «diferentes actores, una comunidad extremadamente múltiple que queremos poco a poco poner a trabajar». El objetivo «es que el Centro no sea un simple archivo, no sea un simple museo o contenedor de imágenes, sino que sea un Centro activo y, por tanto, la constitución de una red estatal fotográfica». Un «activador» para «permitir que todo lo que se ha trabajado de forma aislada hasta ahora se pueda trabajar en red».

Este papel dinamizador acompaña a las grandes reivindicaciones o «líneas rojas» de la Plataforma en torno a la institución en Soria. Se trata de «la cuestión de la conservación, hay un espacio de conservación y unas políticas en torno al patrimonio fotográfico; que haya un espacio de difusión y promoción del patrimonio, tanto histórico como contemporáneo; que haya un espacio de investigación y de educación», expresó Maunac. Tales serían «las tres grandes ‘patas’» del Centro Nacional. «Nosotros, donde estamos es constantemente recalcando cuáles son los objetivos que consideramos esenciales a la hora de conformar el Centro y habilitarlo en torno a esas necesidades fundamentales», afirmó. En este contexto, «tenemos que ver el equilibrio arquitectónico que se va a hacer en torno a ello».

El Ministerio de Cultura está redactando el plan de contenidos y actividades, del que «tenemos algún avance». De momento, «no todo» de lo que plantea el colectivo está incluido. Se espera una reunión, en la que los técnicos, tanto los propuestos por el sector como los del Ministerio «puedan juntos diseñar el mejor proyecto posible».

En cuanto a la sede física, el antiguo Banco de España, «es un edificio que puede albergar perfectamente un Centro bien preparado». Hay instituciones similares que disponen de menos superficies y, en el caso de Soria, hay «un «espacio más que suficiente para tener al menos esas tres ‘patas’ representadas». Es decir, la conservación de fondos, su difusión y el apartado formativo.

Por otra parte, no hay que perder de vista la proximidad del palacio de Alcántara, en su mayor parte en manos municipales y que el Consistorio ha ofrecido para una posible ampliación. Esto hace que «todo lo que es nuestra ambición de que sea mucho más».

Soria «es el mejor sitio del mundo porque es el sitio, es el que se ha decidido y así será», explicó Maunac sobre la designación de Soria como sede tras una larga espera para que España cuente con un Centro Nacional. Además, por su «escala humana» puede diseñarse «una programación o un espacio que a lo mejor en una gran ciudad es más complicado».