Sucesos
Varios detenidos en Soria por la paliza a un aficionado donostiarra en el Numancia-Cornellá
El hombre de 44 años estuvo en coma inducido y salió de la UCI el pasado verano. La operación policial ha estado coordinada por la Comisaría General de Información de Madrid y también se ha desarrollado en otras ciudades. La plaza Mariano Granados ha sido el centro de operaciones en la ciudad
Una operación policial desarrollada este lunes en la capital soriana se ha saldado con varios detenidos involucrados en la agresión que sufrió el donostiarra de 44 años Ion Aranburu, el pasado 27 de mayo, en la previa del último encuentro de Liga de 1ª RFEF disputado en Los Pajaritos, entre el Numancia y el Cornellá. Aranburu fue con un amigo de Cornellá a ver el encuentro a Soria, y acabó en coma inducido después de recibir una paliza de distintos ultras.
En el Hospital de Burgos permaneció dos semanas y media en coma inducido y, tras recuperar la consciencia, fue trasladado en ambulancia medicalizada al Hospital Donostia, donde salió de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) el pasado mes de julio, aunque por delante le resta una larga recuperación.
La operación policial, que permanece abierta, ha estado coordinada por la Comisaría General de Información de Madrid, según han confirmado fuentes de la Delegación del Gobierno en Castilla y León, que no han añadido más datos al estar la operación abierta y pendiente de la puesta a disposición judicial de los detenidos. Inicialmente, según ha podido saber este periódico, se barajaba con que se hubieran producido 3 detenciones, aunque otras fuentes elevan a 8 los detenidos, y precisan que se trata de aficionados numantinos, algunos de ellos del Orgullo Numantino. La Subdelegación también ha reconocido detenciones, aunque sin facilitar el número.
La operación coordinada desde Madrid también se ha desarrollado en otras provincias del país, Zaragoza y Madrid, en el que también se habrían producido detenciones. Se da la circunstancia de que en aquel encuentro hubo una amalgama de aficionados radicales.
Esta operación no ha pasado desapercibida en Soria, ya que al filo de las 10 y media de la mañana de este lunes tres furgones policiales y un coche patrulla se han dado cita en la plaza Mariano Granados de la capital para coordinar el operativo y proceder a las detenciones. Pasadas las once de la mañana, los agentes de Policía han abandonado la plaza, no sin antes coincidir con la delegada del Gobierno de Castilla y León, Virginia Barcones, y el subdelegado del Gobierno, Miguel Latorre, quienes saludaron a los policías en pleno desarrollo de la operación. Fuentes de la Subdelegación del Gobierno explicaron que la operación estaba relacionada con los «extremismos».
Además de los detenidos, también hay otras personas en Soria investigadas con el suceso de aquel partido del mes de mayo. La operación sigue abierta y no se descartan más detenciones. Fuentes judiciales han señalado que todavía no han pasado a disposición judicial y fuentes próximas han reconocido que a algunos se les imputa pertenencia a banda criminal.
Según informó la prensa guipuzcoana, el donostiarra no recuerda nada de lo que le ocurrió el fatídico día que viajó a Soria a encontrarse con un amigo y acabó debatiéndose entre la vida y la muerte.
Los golpes en la cabeza reiterados dejaron al aficionado inconsciente en el suelo. Los altercados se produjeron en la previa del partido de fútbol que finalizaría con el Numancia en la 2ª RFEF (1-2), en la calle José Tudela, a pocos metros del estadio de Los Pajaritos, alrededor de dos horas antes de que comenzara el encuentro.
El hombre fue golpeado por unos ultras un bar cercano al estadio y quedó inconsciente tirado en el suelo boca abajo. El hincha fue trasladado al Hospital Universitario de Burgos con una herida abierta en la cabeza. Cuatro personas fueron detenidas y posteriormente puestas a disposición judicial, aunque posteriormente fueron puestas en libertad por decisión judicial, según indicaron las mismas fuentes. Entre los involucrados apuntaban a seguidores del Numancia vinculados al Orgullo Numantino, a ultras del Zaragoza como los Ligallos y a aficionados del Leganés.