Inhibidores de frecuencia y detectores de la Policía para ejecutar 26 robos, seis de ellos en Soria

La Guardia Civil de Soria, a través de la Unidad Operativa de Policía Judicial, ha logrado esclarecer 26 robos con fuerzas perpetrados entre los meses de abril y diciembre de 2023, en Castilla-La Mancha, Castilla y León, Madrid y Zaragoza. Seis de los atracos se produjeron en Soria en las localidades de Almazán, Medinaceli y Barahona. En el marco de la operación Jarrón el pasado 21 de diciembre se produjo un registro en una vivienda en Alcalá de Henares (Madrid) donde se encontraron numerosos objetos sustraídos y se detuvo a un varón de 43 años como presunto autor de los delitos. 

El subdelegado del Gobierno en Soria,  Miguel Latorre, junto al responsable de la Comandancia de Soria, el teniente coronel Sergio Peñarroya, presentaron el resultado de una operación que aún sigue abierta. Latorre confirmó que el detenido ya ha pasado a disposición judicial y se ha decretado su ingreso en la prisión de Soria. "La operación ha sido un éxito", destacó Latorre. 

Peñarroya destacó que los hechos se producen entre los meses de abril y diciembre de este año. La investigación la inicia Soria tras detectar que cinco de los robos producidos en Soria -en un bar de Almazán, tres de Medinaceli y la iglesia de Barahona- estaban "relacionados". 

Desde la Guardia Civil se explicó el elevado nivel de "especialización" del detenido que ponían en marcha diferentes sistemas para evitar la acción policial. En primer lugar, el ladrón residía en Alcalá de Henares (Madrid)  y actuaba con un Ford Kuga robado en Madrid al que le había instalado unas placas de matrículas sustraídas en Burgos. Para cada robo se desplazaba con diversas herramientas y sistemas de protección. En concreto, llevaba un extractor de bombines, un inhibidor de frecuencias GSM que lograba desconectar la mayor parte de los sistemas de alarma y un detector de frecuencias de la Policía para tratar de evitar la acción de la Guardia Civil. Además, portaba un espray de autodefensa y una porra extensible, ambos elementos, dentro del catálogo de armas prohibidas. 

El desarrollo de la operación policial alcanzó su punto clave el 21 de diciembre cuando los agentes de Soria, con el apoyo de la Comandancia de Madrid, se produjo un registro autorizado judicialmente en una de las viviendas del sospechoso en Alcalá de Henares. Entre los efectos recuperados figuran 1.500 euros en efectivos, tres armas cortas, armas prohibidas, extractores de bombines, joyas, kit de pesaje de joyas, elementos de comprobación de oro y productos químicos para determinar la pureza del oro, décimos de lotería y el vehículo robado. 

Los 26 robos se distribuyen en varias provincias: 6 en Soria, 3 en Burgos, 1 en Madrid, 3 en Zaragoza, 10 en Segovia, 2 en Guadalajara y 1 en Toledo. Uno de los más extraños es el de la iglesia de Barahona -principalmente los golpes se realizaban en bares y domicilios- donde forzó la cerradura, pero no encontró nada que robar. La operación sigue abierta para determinar si es responsable de más robos o si hay más personas implicadas. Además de los 26 robos con fuerza, al detenido se le implica otro delito de tenencia ilícita de armas, otro por robo de vehículo a motor y otro por falsedad documental -placas robadas-. El caso se lleva desde el Juzgado de Almazán.