La UTE del tramo Fuensaúco-Villar cierra el trámite que acerca la obra

Las obras del tramo Fuensáuco-Villar del Campo, dentro de la extensión de la A-15 en dirección a Navarra, cierran sus trámites empresariales y la fecha del ‘encargo’ queda en manos del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible. La oferta mejor valorada, la de Padecasa Obras y Servicios y Vías y Construcciones. La UTE se encuentra a un paso de la adjudicación definitiva, después de cumplimentar la documentación requerida como propuesta de la Mesa de Contratación. La firma justificó «los requisitos de capacidad jurídica de obrar, de solvencia técnica, económica y financiera, los criterios técnicos sujetos a valoración mediante fórmulas y la constitución de la garantía definitiva», según el acta de la Mesa. Es decir, la UTE da el salto de la antigua adjudicación provisional a la definitiva.

La inversión asciende a 99,1 millones para ampliar el recorrido de la A-15 en la parte oriental de la provincia en dirección a Navarra. Son los primeros 15 kilómetros que se construyen después de que hace bastantes años entrara en servicio la variante de Ágreda. El plazo de ejecución es de 59 meses, un aspecto que podía haberse acortado, ya que el proyecto contemplaba 24. Sin embargo, la disponibilidad presupuestaria y el momento del arranque de los trabajos condicionaron este tiempo más largo.

El programa de obras tiene dos aspectos llamativos que lo condicionan. Por una parte, la historia. Por otra, la fauna. En lo primero, habrá que tener en cuenta la posibilidad de que una antigua calzada romana aflore. Es el de Uxama a Augustobriga, que puede aflorar en Aldealpozo. Una cuestión que no es menor, pues ya surgió este mismo itinerario en la A-11, en el Temeroso, lo que motivó un modificado. En dirección a Ágreda, las operaciones pueden chocar en el llamado Camino de Tajahuerce, del que se estima que puede haber reutilizado el trayecto romano. El punto se encuentra a 350 metros del casco de la localidad. Patrimonio introdujo en el proyecto las correspondientes precauciones.

En cuanto a la fauna, las intervenciones deberán tener en cuenta paradas para no afectar a los periodos críticos de la alondra ricotí, una rara especie que puede verse afectada por los ruidos.

Por otra parte, cabe la posibilidad de que las sorpresas arqueológicas no falten en los siguientes tramos de la Autovía de Navarra. Y es que el siguiente, de Villar del Campo al enlace de Ágreda dibuja su traza encima de nada menos que siete yacimientos. No está claro su potencial, pero sí están documentados como correspondientes a las edades Prehistórica y Calcolítica (Edad del Cobre). También constan garantías de Patrimonio.

Entre Ágreda y Tarazona, el proyecto constructivo estima que, ya en Aragón, pueda aparecer la vía romana de Zaragoza a Astorga por Cantabria.