SOS de los ganaderos de extensivo
Decenas de profesionales defienden ante la Delegación Territorial de la Junta y de la Subdelegación del Gobierno un sector "crucial para Soria"
Reivindicación de la labor medioambiental de la ganadería extensiva
Con el sonido de los cencerros decenas de ganaderos de extensivo de la provincia se concentraron ayer por la mañana frente a la Delegación Territorial de la Junta en Soria y después a las puertas de la Subdelegación del Gobierno para protestar por el abandono de las administraciones a un sector “vital” para el mantenimiento de los pueblos y del medio rural. Encabezando al grupo, una cruz con cráneos para visibilizar “lo que va a quedar de la ganadería en la provincia si la situación sigue como hasta ahora”, tal y como sentenció Diego Escalada, de la junta directiva de Asaja Soria.
La concentración de ayer responde a la grave crisis estructural por la que atraviesa el sector desde hace muchos años, un sector “crucial para Soria”, pero cuyas reivindicaciones se quedaban “un poco descolgadas de las movilizaciones del último mes de agricultura, má específicamente en la provincia por el valor que tiene el extensivo, que de todas las ganaderías es la más abandonada de todas, con palos por todos los lados”, indicó Antonio Medrano, de la ejecutiva de UPA Soria.
La gota que ha colmado el vaso es que esta misma semana se ha publicado una modificación de superficies que afecta directamente a los ganaderos porque van vinculadas a las ayudas que reciben. “Han barrido la mitad de la provincia y lo hemos perdido sin ningún criterio ni argumento”, lamentó Medrano. “Tenemos un problema muy grande con la admisibilidad de los pastos que llevamos arrastrando desde hace muchísimos años y este año se ha agravado con el nuevo coeficiente”, añadió Escalada. Sin olvidar los problemas de saneamiento o el lobo, las otras dos “condenas” del sector.
En la provincia hay en torno a unos 300 ganaderos de extensivo y buena parte de ellos son jóvenes, tal y como se demostró ayer en la concentración. Medrano puso de manifiesto que “hay que buscar alguna fórmula para realmente poner en valor la ganadería de extensivo de la provincia, sostenida en su mayor parte por gente joven, un potencial tremendo que no se puede perder porque son los que van a sujetar la población en el medio rural”.
Medrano reconoció el hartazgo del sector que lleva “años reivindicando lo mismo”, y espera que esta vez las administraciones tengan en cuenta sus peticiones. “Si vas con argumentos no te hacen caso; parece ser que sólo escuchan cuando alguien revienta las calles”.
“El futuro de la ganadería de extensivo está en jaque por todas las trabas que nos están poniendo, y ahora además nos han recortado considerablemente los pastos, de tal modo que buena parte de los que hoy estamos aquí tendremos que abandonar”, señala una ganadera del Valle.
Medrano insistió en que los ganaderos de extensivo realizan una labor medioambiental importantísima, algo que a su juicio “es un contrasentido que no se tenga en cuenta por el Ministerio de Transición Ecológica, que no está diciendo ni mu en todas las movilizaciones cuando somos el pilar fundamental de la sostenibilidad ganadera de extensivo y sin embargo estamos los más abandonados. Y para más inri la primera decisión que toma el ministerio es defender al lobo y sobreprotegerlo”.