Torrijas: la tentación más dulce de Semana Santa

Las torrijas son uno de los dulces más emblemáticos de la gastronomía española. Aunque es un producto típico de la época de Cuaresma y Semana Santa, su popularidad en muchas regiones de España lo convierte en un manjar imprescindible durante cualquier época del año.

Su origen se remonta a la Antigua Roma donde lo utilizaban como fuente de energía para los soldados durante las batallas y, no fue hasta la época medieval, cuando la gastronomía española incluyó este producto entre sus postres más típicos y tradicionales.

El nombre «torrija» proviene del latín «torrere», que significa tostar, haciendo referencia al proceso de dorado que se le da al pan. Originalmente, se elaboraban con pan duro remojado en leche, a veces con vino, y luego se freían en aceite de oliva. Posteriormente, se bañaban en miel o se espolvoreaban con azúcar y canela. Pero, a día de hoy, esta es solo una de las cientos de recetas y variedades que existen ya por todas las partes del mundo.

El motivo de popularizar este dulce durante la época de Semana Santa, concretamente durante el Jueves Santo y Viernes Santo, está relacionado con la tradición cristiana que prohíbe comer carne roja durante esos días. Por este motivo se cree que comenzaron a introducirse muchas recetas aptas para estas fechas, entre ellas las torrijas, que podían elaborarse muy fácilmente de los restos del pan que sobraba de otras recetas. Con ello, conseguían dos soluciones: alimentar y hacerlo a bajo coste.

El éxito de este dulce típico se mantiene a día de hoy en hogares, pastelerías y restaurantes, una mezcla de tradición y modernidad reflejada en un mismo plato. La gran variedad de recetas y la posibilidad de jugar con nuevos sabores o texturas sin romper con la base tradicional, incrementa el atractivo para los profesionales gastronómicos. Prueba de ello, es la celebración del Concurso Nacional de Torrijas organizado por la Academia Leonesa de Gastronomía desde el año 2013. Los participantes tienen la oportunidad de demostrar anualmente su creatividad repostera en cuatro categorías establecidas : tradicional, innovadora, salada y stevia.

Sabor y tradición

Con cada mordisco, las torrijas nos transportan a un mundo de tradición, sabor y placer culinario.

En España, existen múltiples variantes, comenzando por el pan, que puede ser pan corriente del día anterior o una masa preparada especialmente. La especia imprescindible es la canela, aunque a veces se le añade también clavo de olor y otra opción, aunque menos habitual, es añadir nata o crema pastelera. Recientemente, también se han elaborado variedades vegetarianas que sustituyen la leche de vaca por leche de soja y los huevos por harinas de garbanzo, soja u otras leguminosas.

La popularidad de este dulce no conoce fronteras. Países de todo el mundo incluyen las torrijas en su oferta gastronómica. Además, la posibilidad de incorporar y combinar ingredientes típicos y tradicionales de cada región, lo convierte en uno de los postres estrella de cualquier restaurante. En los países centroamericanos se las llama «torreja». La receta consiste en pan rebozado en huevo y frito en mantequilla, usualmente bañado en panela. En Chile se conocen coloquialmente como «caballeros pobres» y en el sur de México se llaman «estorrejas». La receta incluye un pan llamado «bollo», tradicional de la región, huevo, canela, agua y piloncillo.

En el norte de Europa y centroeuropa se ha popularizado otra versión de este plato conocida como tostada francesa y elaborada, tradicionalmente, con pan duro. Es parecida, pero no se reboza y se cocina con una menor cantidad de aceite o en una capa de mantequilla. El interés por este producto ha llegado también al continente asiático. El estilo de Hong Kong de la tostada francesa es con rodajas de pan fritas mojadas en huevo o soja batida, servidas con mantequilla y cubiertas con miel o miel de caña.

Aunque pueden degustarse durante todo el año, son típicos en Semana Santa o Navidad.

Postres de concurso

El próximo día 22 de marzo, coincidiendo con la celebración del Viernes de Dolores, el Mercado Municipal de la capital albergará el I Concurso Popular de Torrijas y Limonada organizado por el Ayuntamiento de Soria y la Asociación de Comerciantes del Mercado Municipal ( ASOCOMM). Se trata de un concurso popular abierto a todas las personas mayores de 18 años no profesionales del sector de la hostelería que podrán elegir participar en una o en ambas modalidades

El objetivo de esta nueva actividad es destacar productos tradicionales como las torrijas y la limonada que aportan el toque más dulce a la Semana Santa declarada Fiesta de Interés Turístico Regional.

La receta: torrijas caseras con miel 

Con una historia arraigada a las épocas de escasez y ayuno, es precisamente esto el motivo de su popularización durante la Cuaresma. Bañadas en leche o vino, es un postre imprescindible en estas fechas. El secreto de esta receta de torrijas caseras, es agregar un almíbar de miel para darles un toque más dulce y una textura más jugosa todavía. Como en la receta tradicional o en su versión de torrijas en el microondas, infusionar la leche con el clásico toque a canela y añadirle un ingrediente extra: un chorrito de vino moscatel, que como buen vino blanco le aportará un aroma rico e intenso.