La Conferencia de Escritores firma en Soria su primera página

El recién estrenado espacio cultural Santa Clara de Soria fue escenario ayer del nacimiento de la Conferencia de Asociaciones de Escritoras y Escritores. La capital fue elegida al objeto de servir de homenaje al 85 aniversario del exilio y muerte del poeta Antonio Machado. El colectivo da sus primeros pasos con el objetivo de ser una «plataforma de demandas» tanto al gremio de editores como a la propia administración –fundamentalmente el Ministerio de Cultura– para reclamar «una serie de derechos que debe ser respetados y garantizados»., según explicó el escritor y presidente de la Asociación Colegial de Escritores (ACE) Manuel Rico.

La Conferencia de Asociaciones de Escritoras y Escritoras nace para «combinar» la actividad de las diferentes asociaciones repartidas por España y establecer «una plataforma de demandas» de cara las negociaciones con el gremio de editores y con las administraciones. Se pretende de esta forma dar respuesta a «una serie de derechos que deben ser respetados y garantizados». «Hasta ahora no había una organización de carácter nacional que coordinara a todas las entidades», destacó Rico. El proceso, iniciado hace años, se paralizó por la pandemia y ayer se culminó.

Rico no ocultó que una de las principales amenazas sobre el colectivo de escritores «se llama Inteligencia Artificial (IA)» que afecta a «escritores, periodistas y creadores en general». También hay otros aspectos importante como «la necesidad de que los escritores autónomos tengan una cotización similar a la que se ha establecido para los artistas» o que «los autores que se jubilen puedan seguir creando». «Se ha conquistado en buena medida, pero hay que garantizar a todos los jubilados, incluso con pensiones no contributivas, que puedan compatibilizar pensiones con derechos de autor», subrayó el escritor.

Con respecto a la Inteligencia Artificial, Rico expresó que tienen la «sospecha» de que las plataformas digitales «están utilizando contenidos sometidos a derechos de autor sin tener autorización de los autores y sin pagar una remuneración por ese uso». La pretensión es que a la hora de llevar a cabo la transposición de la nueva normativa europea a la legislación española se establezca que «cualquier contenido que pase a plataformas digitales tenga autorización del autor y que digan con claridad que productos están hechos con IA y cuáles no».

Rico apuntó que actualmente el 84% de los escritores «no viven de los derechos de autor ni las actividades literarias». Solo hay un 4% de los autores pueden vivir de esos derechos. «Es evidente que los que son autónomos tienen que tener una protección, además de la Seguridad Social, y poder tener garantizada la jubilación para poder seguir creando», expresó. Rico incidió en que la propiedad actual es la única en la que pasado un plazo de tiempo pasa a dominio público.