Soria tiene más de 151.000 hectáreas con el sello de certificación forestal
La provincia cuenta con 23 empresas que utilizan madera certificada; 14 son aserraderos, cuatro trabajan con astillas, pellets y biomasa, tres se dedican a la madera y construcción, y dos, de pasta, papel y mobiliario
Desde que en el año 2002 empezó la certificación forestal sostenible, Soria ha sabido aprovechar esta herramienta de ordenación del monte para buscar la compatibilidad de los recursos y los aprovechamientos. De hecho, suma ya 151.767,73 hectáreas forestales certificadas, casi el 34% del total de la superficie arbolada en la provincia, 447.000 hectáreas. Y gracias a esto en la provincia son ya 23 las empresas que cuentan con el sello sostenible PEFC y utilizan como materia prima madera certificada para sus productos finales, según los datos aportados por la Asociación Española para la Sostenibilidad Forestal, la mayoría aserraderos y rematantes.
Así, 14 de las 23 empresas que emplean madera con sello PEFC figuran como aserraderos y rematantes, otras tres se dedican a la madera y construcción, otras dos de pasta, papel y mobiliario y cuatro tienen el certificado para trabajar astillas, pellets y biomasa gracias a las 151.767,73 hectáreas forestales certificadas en Soria.
La certificación PEFC garantiza que todos los montes certificados tienen un plan de gestión en vigor que integra los criterios e indicadores de la gestión forestal sostenible de la norma UNE 162.002, esto asegura el cumplimiento de los tres pilares de la sostenibilidad, con aspectos sociales, económicos y ambientales. Pero además de ser una herramienta que garantiza una gestión sostenible de los bosques, pone en valor la multitud de productos y otros bienes y servicios que ofrecen, permitiendo obtener beneficios económicos del aprovechamiento de los múltiples recursos forestales (madera, papel, biomasa, corcho, resina, miel, castaña, plantas aromáticas, setas, cerdo ibérico, entre otros).
Llama la atención que el 25% de esta superficie está incluida en la Red Natura 2000, la red ecológica europea de áreas de conservación de la biodiversidad, con 37.798,32 hectáreas bajo esta figura de protección, de las que 28.146,36 hectáreas son Lugares de Importancia Comunitaria (LIC) y Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA) designadas en virtud de la Directiva Aves; otras 9.550,68 hectáreas son ZEPA y 101,27 hectáreas son LIC.
Lo cierto es que desde el año 2002 la provincia ha visto incrementada la superficie forestal certificada en más de un 80%, cuando contaba con 84.000 hectáreas con sello PEFC.
Cabe recordar que aunque el sistema español fue reconocido en 2002, el de la Junta de Castilla y León no se emitió hasta febrero de 2004 y como certificado individual, con 100.391,31 hectáreas, de las cuales 63.898,43 eran de Soria. No obstante, no fue el primero, ya que como mínimo debió haber al menos tres certificados anteriores al suyo. En 2007 pasó de ser un certificado individual a uno regional, dando acceso al sello a los propietarios privados.
La mayor parte de la superficie certificada,138.444,75 hectáreas, es de gestión pública (montes de utilidad pública principalmente, administrados conjuntamente por la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, y por las entidades públicas propietarias), y 13.245,86 hectáreas corresponden a montes de gestión privada, tal y como indican los datos de Cesefor. Montes que, tal y como añaden fuentes de la Fundación, se caracterizan por su uso múltiple: de protección, producción (madera, leñas, pastos, miel, resina o caza, entre otros) y recreo, garantizando siempre la persistencia, estabilidad de las masas forestales.
En cuanto a las especies que predominan en la superficie certificada, el pino silvestre y el pino pinaster son las más abundantes, con 57.809 y 46.294 hectáreas respectivamente. Les sigue el pinus nigra o pino laricio, con 11.001 hectáreas y, a continuación, las quercíneas (encina y rebollo), con 10.442 hectáreas de quercus pyrenaica, 8.757 hectáreas de juniperus thurifera, 4.257 de quercus illex. En menor cantidad están sabina y haya y otras especies como enebro o chopo de producción.
Cabe señalar que PEFC es el sistema de certificación forestal más implantado en España y en el mundo. A nivel nacional, las hectáreas con este sello superan los 2,7 millones y 65.000 propietarios y gestores. Y a escala internacional, más de 290 millones de hectáreas de superficie forestal se gestionan de acuerdo a los Criterios Globales de Sostenibilidad de PEFC, es decir, aproximadamente el tamaño de Egipto, Sudáfrica y Turquía juntos. Tres cuartas partes de todos los bosques certificados a nivel mundial están certificados con el sistema PEFC. Debido a las diversas modalidades de certificación, es un sistema que ofrece una gran capacidad de adaptación a las diferentes casuísticas territoriales, a la diversidad de las masas forestales y a la multifuncionalidad de los montes.
Pero también existen otros sistemas como el FSC (Forest Stewardship Council, una organización mundial sin ánimo de lucro que lleva dedicándose, desde hace más de 25 años, a promover la gestión forestal responsable en todo el mundo), con certificados de Gestión Forestal Sostenible, Cadena de Custodia y Madera Controlada, este último controla que la madera que se mezcla con la madera certificada cumpla con la legalidad.
Desde 2022 hasta la actualidad en Soria son 6.824 hectáreas de superficie con el sello FSC, distribuidas en 10 montes cuya especie principal es el pino silvestre, junto con otros pinos y otras especies forestales, localizadas en los municipios de Villar del Río, El Royo, La Póveda de Soria, Valdeavellano de Tera y Rollamienta. El aprovechamiento principal es la madera, aunque son montes multifuncionales con aprovechamiento de leñas y otros no maderables tales como pastos para ganado en extensivo, caza, setas y miel.