Sociedad
La iglesia del Salvador de Soria sufre filtraciones en el techo y una pared interior cuando llueve
El párroco atribuye el suceso a las botellas y porquería que se arrojan al tejado
La iglesia del Salvador, en Soria, sufre filtraciones de agua en su interior cuando llueve. Las filtraciones se producen en el interior del templo en la zona derecha antes del área del altar. El agua discurre por la pared y también gotea directamente desde la cubierta cuando llueve de forma continuada.
Así ha ocurrido en estos pasados días de Semana Santa tal y como trasladaron fieles que visitaron el templo y pudo constatar también este periódico. Así, en la noche de Jueves Santo, el último banco lateral estaba cubierto de agua, que caía directamente desde el techo.
Mientras, la pared mostraba signos de humedad y también escorrentías de agua, algunas de las cuales habían llegado ya al banco más cercano a la pared.
Afortunadamente, y al menos en esa noche, el agua no había tocado ninguno de los cuadros de la exposición que durante esta Semana Santa ha podido verse en El Salvador, obras en blanco y negro sobre Cristo.
El párroco del Salvador, Alberto de Miguel, indicó que lo sucedido «lleva ya tiempo» y «no es cosa de ayer». El sacerdote atribuyó el suceso de las filtraciones al «buen comportamiento de ciudadanos», ironizó, que tiran botellas y porquería al tejado, causando rotura de tejas y atascando los canalones. «Con ese civismo no vamos a ningún lado», agregó. El párroco comentó asimismo que las puertas estaban «destrozadas» y que el Ayuntamiento no hacía nada. A la pregunta de si se habían denunciado los hechos, De Miguel manifestó que la institución «lo sabe».
El viejo templo se derribó en 1967 para construir uno moderno y con una mayor capacidad, manteniendo tan solo la zona del ábside románico, convertido en Capilla del Sagrario. La iglesia es mucho más amplia que la original y construida básicamente en hormigón. «El ábside que se ha mantenido cumple ahora las funciones de Sagrario y las capillas laterales de Sacristía», según la historia sobre el templo que aparece en el portal Sorianitelaimaginas. Los arquitectos de la nueva construcción fueron los hermanos Francisco y Juan María Bellosillo García y Luis Jiménez Fernández.
Esta iglesia fue la única collación (parroquia) extramuros de la muralla de Soria y su fundador, según la tradición, fue un nieto de Fortún López, encargado supuestamente de la repoblación de Soria. Y aún tiene otra característica que la hacen diferente al resto: fue cedida en 1169 a la Orden de Calatrava, razón por la que no figura en el censo parroquial de Alfonso el Sabio, al no depender de los obispos. Se cree que se erigió en iglesia parroquial en 1322, trasladándose a ella la primitiva iglesia de Nuestra Señora del Puente.