Maltrato animal. Arrojan a un contenedor de Soria cuatro gatos vivos recién nacidos (vídeo)
Redención se ha hecho cargo de los dos que han sobrevivido, encontrados por un grupo de jóvenes junto a los huertos urbanos
Cuatro gatos recién nacidos vivos han sido arrojados a un contenedor de basura de la capital, donde los han encontrado un grupo de chavales alertados por los débiles maullidos que se oían desde su interior. El suceso ha tenido lugar a primera hora de la tarde de este sábado cerca de la zona de la Barriada, junto a los huertos urbanos, que adjudica el Ayuntamiento de Soria.
Dos de los gatitos arrojados a la basura.
"Veníamos de comer del burguer pasando por las huertas cuando hemos escuchado maullidos de un contenedor", explican los jóvenes, sin salir de su asombro: Adrián, Alejandro, Izan, Dani, Jessica y Lidia. De su interior sacaron una bolsa de basura llena de hierbas y matojos y dentro de ésta "otra bolsa más pequeña atada en la que había cuatro gatitos. Dos estaban ya muertos y los otros dos maullaban, así que creemos que bien". El contenedor era marrón, de los utilizados para materia orgánica como restos de poda, plantas, comida...
Los rescatistas dieron parte del hallazgo a la Policía Municipal y llamaron a una protectora. Los agentes acudieron al lugar y se llevaron las dos crías muertas, pero declinaron hacerse cargo de los otros con el argumento de que era difícil que sobrevivieran, según los muchachos.
"La cajera de un Día cercano ha sido muy amable y nos ha dado una botella de agua para que refrescáramos a los gatillos, aunque no sabemos si hemos hecho bien". El jersey de Jessica sirvió de manta improvisada para que descansaran los animales, hasta la llegada de una joven voluntaria de Redención, que finalmente se ha hecho cargo de los dos gatitos.
"No entiendo cómo puede alguien que haga algo así. Si no quieres a los animales, pues llamas a una protectora o los das, pero tirarlos así, en una bolsa dentro de otra, no tiene nombre", dijo uno de los chicos.
Tirar animales vivos a la basura, amén de ser contrario a un mínimo sentido de conciencia social y civismo, es maltrato animal en toda regla y va contra la Ley de Protección de los derechos y el Bienestar de los animales.