Patrimonio
El alcalde advierte que para ‘salvar’ los Arcos «habrá que optar por la solución menos mala»
Martínez se muestra reacio a tocar el azud y reclama «buscar puntos de acuerdo»
La situación de los Arcos de San Juan de Duero preocupa, y mucho, a las administraciones. El Ayuntamiento de Soria forma parte de un grupo de trabajo, liderado por el Ministerio de Cultura, de cara a analizar el estado real del monumento y, sobre todo, planear intervenciones que puedan asegurar su supervivencia. Mucho del foco está puesto en intervenciones sobre el entorno que incluso podrían modificar la fisonomía del Duero a su paso por la ciudad. El alcalde, Carlos Martínez, dejó entrever que algunas de las propuestas que hay no terminan de convencerle, pero que «habrá que optar por la propuesta menos mala».
«Está claro que estamos preocupados, es un elemento patrimonial que aunque no es de nuestra propiedad, forma parte de la ciudad», explicó. El Ayuntamiento está dispuesto a colaborar en todo aquello que sea necesario para favorecer la situación del monasterio de San Juan. «No nos esconderemos», insistió recordando también que tanto el Estado –propietario del bien– como la Junta –tiene asumida la gestión– disponen de un mayor volumen de recursos económico para hacer frente a las actuaciones que pudieran necesitarse.
Martínez confirmó que el Ayuntamiento está participando en las reuniones «técnicas» que se han ido produciendo y ya advirtió que las soluciones «ni serán fáciles ni sencillas». «Está claro que los arcos sufren y hay que buscar puntos de acuerdo», insistió.
Una de las cuestiones que ya en análisis anteriores se ha puesto sobre la mesa es la influencia que tuvo la construcción del azud del molino en la elevación del nivel freático y por tanto, la multiplicación de las filtraciones en el claustro. Martínez recordó que esa infraestructura es la hoy configura la ‘imagen’ del Duero a su paso por la ciudad con la ‘cascada’ del Sotoplaya y el Posteguillo. «Hay que elegir la solución menos mala», avanzó.
El plan para actuar en los arcos de San Juan ha avanzado notablemente en los últimos meses. Tras varias reuniones el Ministerio de Cultura ya se ha puesto al frente de un grupo de trabajo encaminado a analizar la situación y plantear las actuaciones. Además del Ministerio, en el equipo configurado participan la Junta, la Confederación Hidrográfica del Duero, el Ayuntamiento y la Diputación. Además de las reuniones técnicas, ya se ha producido una visita presencial al monumento. «Es necesario tomar medidas correctoras en los niveles del Duero a su paso por San Juan, los arcos llevan 800 años y el Duero toda la vida, pero el nivel no es el mismo, hay que conseguir alinearlo», subrayó el responsable de Patrimonio de la Junta apostando por «conjugar el curso del río con la conservación de un elemento patrimonial de primera categoría», advirtió hace unos días el director general de Patrimonio de la Junta, Juan Carlos Prieto.