Tribunales
La herencia millonaria de la hijastra de la Duquesa Roja se decide en Soria
El Juzgado número 2 resolverá la cuantía a la que tiene derecho Rosario Bermudo, una vez reconocida, tras años de litigio, como hija de Leoncio González, el marido de la duquesa de Medina Sidonia / Podría recibir entre 1 y 2,5 millones de euros
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Soria será el que decida la cuantía de la herencia que recibirá Rosario Bermudo, hijastra de la duquesa de Medina Sidonia, conocida como la Duquesa Roja, una vez que el Tribunal Supremo la haya reconocido, después de un litigio de años, como hija de Leoncio González de Gregorio, el que fuera marido de María Luisa Álvarez de Toledo, enterrado en el cementerio de Quintana Redonda.
Rosario Bermudo podría recibir entre uno y dos millones y medio de euros, según indicó su abogado, Fernando Osuna, en virtud de lo que decida el juez y la figura jurídica que considere más adecuada. En términos legales, si estima que existe preterición no intencional, aquella en la que el testador omite a un legitimario, heredero intestado, por ignorancia o error, sería la cantidad superior. Si decide que la omisión fue de forma consciente, la cuantía se reduciría al mínimo de un millón. «En cualquier caso, una cifra significativa para una mujer de 72 años que tiene necesidades económicas», destacó su abogado, con quien ha batallado en los tribunales desde que en 2013 comenzó su periplo judicial para reclamar la paternidad del soriano.
Reconocida ésta por el Tribunal Supremo en octubre del año pasado, ha llegado el momento de reclamar la herencia, apuntó Osuna. «Como existen tantas pruebas y material jurídico que se han ido acumulando a lo largo de los años en el procedimiento de filiación, confiamos en que sea rápido y el día 27 de mayo se pueda dar un paso de gigante», trasladó el letrado, en referencia al juicio previsto para ese día en el Juzgado número 2 de Soria.
Osuna reconoció que el hecho de que se juzgue en Soria hará la resolución mucho más ágil, por mera cuestión de volumen de trabajo, por cuanto la demanda de paternidad se ha demorado unos diez años entre los diferentes tribunales y recursos interpuestos que fueron añadiendo tiempos a las resolución.
«Rosario está muy contenta», aseguró el abogado, por cuanto el proceso va llegando al final y con las pretensiones esperadas, una vez reconocida como hija de Leoncio González de Gregorio, quien la concibió en una finca de Badajoz, donde la madre trabajaba como parte del servicio y cuando el duque de Medina Sidonia era aún menor de edad.
La primera demanda de filiación contra los hijos de la controvertida aristócrata se presentó en 2013. Leoncio González falleció a los 77 años en 2008. Y no fue hasta 2017 cuando el Juzgado número 77 de Madrid reconoció que Rosario Bermudo, natural de Écija (Sevilla), era hija del marido de la Duquesa Roja, fallecida en 2007 y denominada así por defender a los agricultores andaluces.
Los recursos presentados por los tres hermanos, «con su propio abogado cada uno», matizó Osuna, fueron demorando nuevas resoluciones judiciales y en 2022 se produjo la sentencia de la Audiencia Provincial de Madrid. Elevado el caso hasta el Tribunal Supremo, éste declaraba a Rosario como hija legítima definitiva.
Las pruebas de ADN practicadas dieron un resultado de coincidencia del 99,9%, evidenciado la filiación. Rosario Bermudo también tuvo que litigar para obtener una muestra de dicho ADN por las reticencias de los entonces presuntos hermanos a realizarse la prueba y fue necesaria la orden del juez para la exhumación del cadáver de Leoncio González, practicada en marzo de 2017, en el cementerio de Quintana Redonda.
El hecho de que sea el Juzgado número 2 de Soria el que decida sobre la herencia de Rosario Bermudo, que actualmente reside en el municipio madrileño de Torrejón de Ardoz junto a su marido, es debido a que el bien de mayor cuantía de la herencia, que ya recibieron los hijos del duque de Medina Sidonia a su muerte, es el palacio de Quintana Redonda, que cuenta con 2.000 metros cuadrados en 14 hectáreas de terreno, valorado en su momento en unos cinco millones de euros.