Tribunales
La hijastra de la 'Duquesa Roja' en Soria: acuerdo con sus hermanastros, 2,5 millones o prescripción
Un hermanastro de Rosario Bermudo anima a sus hermanos a evitar el juicio previsto para el 9 de octubre y a «olvidar las rencillas». Osuna: «Esta señora es hija, y como es hija, tiene que heredar»
Prescripción o una responsabilidad patrimonial que podría alcanzar los 2,5 millones de euros. Este es el dilema al que se enfrentan los herederos y la hija no reconocida de Leoncio González de Gregorio, Rosario Bermudo, hijastra de la duquesa de Medina Sidonia, conocida como la ‘Duquesa Roja’. Este lunes arrancó en la capital soriana, en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2, la vista judicial por la demanda de Bermudo contra los cuatro hijos de González de Gregorio, Leoncio, Pilar, Gabriel y Javier, después de que el Tribunal Supremo le acreditara como su hija natural.
Las pruebas de paternidad arrojaron a un 99% –previa exhumación de su padre– que Rosario Bermudo es hija de Leoncio González de Gregorio. Ahora pide su parte de la herencia y encomendó la causa a un abogado experto en reconocimientos de hijos no reconocidos, Fernando Osuna (Julio Iglesias o El Cordobés). La jueza llamó este lunes a ambas partes a alcanzar un acuerdo, según la defensa. De lo contrario, ya hay fecha para el juicio en el que se producirán las testificales y la presentación de las pruebas: el día 9 de octubre a las 10.00 horas en los juzgados sorianos.
Un acuerdo que evite, por un lado, que la jueza emita una sentencia perjudicial para Bermudo, esto es, cero euros si acepta que los hechos están prescritos, tesis que defienden los cuatro hijos de Leoncio González de Gregorio. Por el contrario, estos se arriesgan también a que la justicia admita una responsabilidad patrimonial en favor de Bermudo de hasta 2,5 millones de euros. El abogado de Bermudo profundizó en que «si no hay acuerdo alguien va a salir mal parado, o ellos o nosotros, por lo que lo sensato es llegar a un entendimiento y acabar con una buena cantidad. La jueza ha dicho que se trate de llegar a un acuerdo que resulte positivo por ambas partes».
Según Osuna, al acuerdo sería posible con alguno de los hermanos. «Puede darse el caso de que haya acuerdo con dos y con otros dos no, con tres sí y con uno no, no tiene que ser en bloque. Hay que intentarlo con todo aquel que se ofrezca a un acuerdo».
De hecho, en la vista judicial participó uno de los hermanastros de Rosario Bermudo, Gabriel González de Gregorio, quien abogó «por olvidar las rencillas y dar ejemplo de que las cosas se pueden arreglar sin pleitos», e incluso animó a sus otros tres hermanos a llegar a un acuerdo antes del juicio fijado para el mes de octubre. Dejó claro, eso sí, que «tampoco se nos puede pedir mucho porque de nuestra madre no hemos recibido nada, algo que puede parecer sorprendente y que nos ha costado muchos juicios».
Osuna acepta que con los varones el acuerdo puede ser viable, pero el gran escollo estaría con Pilar González de Gregorio, que es la que más heredó «con un tercio de mejora». Pilar Medina Sidonia, propietaria del Palacio de Quintana Redonda (la propiedad más onerosa, de ahí que el juicio se celebre en Soria) y heredera universal de la herencia de su padre, ya ha dejado claro en alguna ocasión que no se opondría a que Rosario recibiera parte de la herencia de su padre, pero «cuando el juez establezca la cantidad, se pagará». Es decir, en este caso habría que esperar a una sentencia.
Osuna también destacó que Bermudo no tendría que recibir todo en metálico, sino que «la jueza contempla la posibilidad de que la herencia sea en forma de pisos o bienes inmuebles».
El letrado avanzó que su demandante ha pedido, en caso de que se celebre el juicio, el interrogatorio de sus cuatro hermanastros. Por su parte, los demandados han pedido el interrogatorio de Bermudo y «han propuesto dos testigos que la jueza ha admitido».
La hijastra de la ‘Duquesa Roja’ tiene la intención de acudir a un Registro Civil para cambiar su apellido, es decir, Rosario González de Gregorio. La mujer llegó al palacio de los Condes de Gómara poco antes de las 10 de la mañana, en compañía de su abogado, para la vista judicial. Conocida en su localidad natal, Écija (Sevilla), como la ‘condesilla’, ya que era voz populi que era hija del marido de la ‘Duquesa Roja’. Bermudo dijo estar «nerviosa» pero también convencida de que la justicia le acabará dando la razón. Sobre la cuantía económica que podría recibir, expresó que «se verá cuando pasemos y se hable porque hasta ahora no sabemos concretamente las cosas. Son muchos años peleando y con muchas ganas de arreglar lo que no hemos podido, por un lado los que no han querido apoyarnos y por el otro, que hemos tenido que llegar aquí y esperamos acabar. Todo se verá».
La hijastra de la Duquesa Roja señaló estar «contenta» porque «por lo menos hemos llegado aquí. Donde estamos es que ni me lo creo, porque tanto tiempo y tanto tiempo se pasa, y luego hay una cosa y otra. Estoy contenta porque sabía que iba a salir e iba a salir bien».
Del mismo modo, Bermudo señaló que «confío mucho en el abogado. Fernando Osuna nos ha ayudado mucho, es muy echado para adelante. Nos decía, ‘venga que no hay que aflojar ahora, hay que seguir para adelante’. Pues claro, hay que seguir adelante siempre con la verdad y eso es lo que he pensado siempre».
Subrayó que «yo de siempre sabía que era su hija. Mi madre me tuvo que dejar en el pueblo por no dejarme en la inclusa, porque no tenía dónde llevarme. Ya cuando mis hijos han sido un poquito mayores me han ayudado y entre unas cosas y otras, hasta que hemos podido. Es que llevamos toda la vida dando vueltas, lo que pasa es que no he podido permitirme nunca un abogado ni sabía que existía algo así. Con mis hijos y la ayuda del abogado hemos llegado creo que hasta el final».
Confía en que haya una resolución rápida porque «ya tengo muchas deudas que pagar». Su batalla judicial para ser reconocida como hija dura 10 años, aunque explicó que realmente se remonta 30 años atrás. «He ido a varios sitios y me decían ‘¡uy, con ese señor tan poderoso’, que no me ha querido ayudar nunca. Yo no tenía ni un duro».
Osuna puntualizó en las puertas del juzgado que Leoncio «no quiso dejarle absolutamente nada y si fuera preterición intencional la cantidad sería más baja, sería 1,2 millones de euros. «Ella es hija, es una realidad incontestable. Es hija y tiene derecho a la herencia». Para el abogado, la clave para que acaben dándoles la razón radica «en la voluntad que tengan» y adelantó que «las costas pueden ser muy altas. Si estamos hablando de un litigio donde como mínimo hay un 1,2 millones de euros, lo que cuesta el abogado y el procurador se puede poner, en el caso más favorable a los hermanos de Rosario, en 125.000 euros de costas, en primera instancia. Si vamos a la Audiencia Provincial y al Tribunal Supremo, esto en costas puede ser una cantidad mucho mayor. Y este factor deben tenerlo en cuenta a la hora de negociar».
Osuna hizo un llamamiento a sus hermanos: «Vamos a dejarnos de orgullos y cuestiones personales. Esta señora es hija, y como es hija, tiene que heredar. Fíjense si esto tiene peso y arraiga que viene de la época de los romanos, siglo II o siglo III, la legítima de los hijos, de los herederos forzosos, hace 2.000 años».
El momento clave de este proceso fue la exhumación de Leoncio, momento en que se acreditó al 99%, una vez practicadas las pruebas de paternidad, que Rosario Bermudo era hija del marido de la ‘Duquesa Roja’. «Se exhumó y nosotros no queríamos, ni mucho menos, pero cuando se niegan los hermanos y los médicos forenses y los facultativos dicen que tienen que ir todos los hermanos, y no querían ir, solo uno, no todos, pues entonces no hubo otro remedio que decirle al juez que se exhumara, y el juez lo acordó. Y aquí llegó la prueba del 99%. Es que se dijo que se exhumó porque Rosario quiso. No. Rosario no. Ellos si se hubieran prestado, los cuatro (hermanos) a hacerse la prueba de ADN, no hubiéramos exhumado. Pero uno o dos se negaban, y no hubo otro remedio que pedir la exhumación».
En cualquier caso, el letrado confía en una rápida resolución. «El juzgado de aquí hasta ahora va muy rápido, a diferencia del de Madrid. Va rapidísimo. Presentamos la demanda hace tres meses y ya estamos aquí. Va bien. De momento está demostrado que ella es hija, eso es una verdad incontestable, no se puede rebatir eso ya. El Tribunal Supremo ha dicho que es hija y como es hija tiene derecho a la herencia»., reiteró.
La primera demanda de filiación contra los hijos de la controvertida aristócrata se presentó en 2013. Leoncio González falleció a los 77 años en 2008. Y no fue hasta 2017 cuando el Juzgado número 77 de Madrid reconoció que Rosario Bermudo, sevillana de Écija, era hija del marido de la ‘Duquesa Roja’, fallecida en 2007 y denominada así por defender a los agricultores andaluces.
El hecho de que sea el Juzgado número 2 de Soria el que decida sobre la herencia de Rosario Bermudo, que actualmente reside en el municipio madrileño de Torrejón de Ardoz junto a su marido, es debido a que el bien de mayor cuantía de la herencia, que ya recibieron los hijos del duque de Medina Sidonia a su muerte, es el palacio de Quintana Redonda, que cuenta con 2.000 metros cuadrados en 14 hectáreas de terreno, valorado en su momento en unos cinco millones de euros.