El plan de Soria para atraer empresas contempla bajadas del IBI
Vinculadas a la creación de nuevos empleos, la medida se prevé para implantaciones o ampliaciones de firmas existentes El documento plantea otras bonificaciones fiscales
Una fiscalidad reducida de cara a nuevas empresas o, con ciertas condiciones, a aquellas ya establecidas. Las bonificaciones o reducciones para dar la posibilidad de incrementar el entramado societario se amplían de la mano del plan de atracción de empresas encargado por el Ayuntamiento, que apuesta por estas fórmulas para hacer más competitivo el término de la capital. En concreto, el plan se fija en el IBI, uno de los supuestos de recurrente discusión política desde hace años. Y plantea la posibilidad de su bajada. Eso sí, para nuevas implantaciones o firmas ya establecidas que amplíen actividad. En todo caso, vinculada a la creación de nuevos puestos de trabajo. En el caso de cooperativas o sociedades laborales la reducción podría ser directa, o al menos el documento no parece ligarla al empleo sino a su carácter de 'economía social'.
El Ayuntamiento lanza el plan de atracción de empresas una vez que el polígono de Valcorba está recepcionado y en plena opción de compra de sus parcelas para los inversores interesados. La captación es una de las 'patas' del documento, que no olvida el apoyo a las empresas y emprendedores ya en funcionamiento en el mercado. Para las nuevas implantaciones o la actividad reforzada de las existentes son varios los incentivos que los redactores ponen sobre la mesa. Por ejemplo, la misma unión con el empleo operaría en una bajada del Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE).
Para el plan también el Impuesto sobre Vehículos sería susceptible de revisión de las bonificaciones. Podrían ser superiores a las que ahora marca la Ordenanza para las compras de vehículos industriales o comerciales y de reparto en función de su carácter no contaminante.
Ayudas a la digitalización, el mantenimiento de las naves nido para emprendedores, ayudas a la instalación en los polígonos de Valcorba o Las Casas y programas de alojamiento temporal para 'startups' (compañías emergentes) y actividades creativas son otras disposiciones susceptibles de impulsar por el Ayuntamiento. A estos incentivos para la creación de empresas se unen otros unidos a la sostenibilidad, como son el respaldo a proyectos que contribuyan al desarrollo equilibrado de Soria.
El plan tiene sendos apartados específicos para dos motores de creación de puestos de trabajo: el sector industrial y el autoempleo. En el primero parece tener muy presente la experiencia de éxito de las naves nido de Valcorba y por eso apuesta por su ampliación ante la demanda creciente. En materia de suelo industrial considera necesario mejorar la información sobre disponibilidad, pero también la adecuación a lo que buscan las empresas. Es decir, conectividad y servicios tecnológicos avanzados.
El autoempleo y el emprendimiento han sido unas referencias para la capital a través de Impulso Emprende, la colaboración municipal con la Cámara de Comercio. De hecho, la buena experiencia ha hecho que sea la institución cameral la encargada de gestionar el plan de atracción, dentro de una estrategia más amplia que engloba a la ciudad como lugar de inversión y residencia. Los recursos propios de Soria, el teletrabajo en sectores aptos para esta modalidad y la atención a los nuevos yacimientos de empleo son algunos de los aspectos del impulso a la creación de firmas en este punto, sin olvidar los proyectos de inclusión social.
La búsqueda de actividades no puede pasar por alto la inversión extranjera. Aquí es preciso ir de la mano del Instituto de Comercio Exterior, que facilita numerosas herramientas a las empresas que quieren potenciar su negocio en España. El plan recomienda reuniones con la entidad de cara a poner en valor Soria como lugar estratégico para los inversores. A este apoyo institucional de cara a la internacionalización tiene que unirse una especie de 'boca a boca' empresarial. Es decir, aprovechar como embajadoras a las firmas que ya están en Soria y que tienen capital extranjero.
El de creación de empresas es uno de los cinco ejes de acción del plan de atracción. A este se suman los de apoyo a las empresas y emprendedores ya implantados; el fomento de la innovación; la transformación productiva; y la mejora competitiva.
Para las empresas actuales se pone sobre la mesa la creación de una hoja de ruta de atención, para conocer sus necesidades y derivarlas a las entidades que puedan satisfacerlas. Apuesta también por el desarrollo de modelos de amenazas y oportunidades por sectores, de manera que se pueda predecir su evolución con técnicas de simulación. Una guía de servicios para empresas, una base de datos de las instaladas y la protección de la inversión existente completan las medidas en este área. En el eje de innovación, destaca en el plan el mecanismo de su compra pública. Se trata de la contratación pública. Mientras que en mejora competitiva se propone intensificar las relaciones entre el sector público y privado, en la transformación productiva resalta la opción por crear consorcios o clústeres en sectores específicos, como bioeconomía o actividades culturales.
Precisamente la bioeconomía (economía del paisaje, silvicultura, agroalimentación, biotecnología) es una de las áreas que pueden dar a Soria un diferencial competitivo. El plan identifica otras cuatro: economía digital (con el efecto 'arrastre' de la implantación en Soria del Centro de Proceso de Datos de la Seguridad Social); economía con impacto social (vida saludable, prevención de enfermedades, bienestar, teniendo en cuenta además el perfil poblacional); 'economía naranja' (todo lo relacionado con la cultura, en la que Soria ha hecho un esfuerzo importante en los últimos años); y economía deportiva (ventajas del entorno natural, las numerosas instalaciones y la existencia de unos estudios universitarios en la materia).