Protos avanza con su proyecto en Soria y pide licencia para su bodega

El proyecto que la emblemática bodega Protos está desarrollando en la Ribera del Duero soriana, en la pequeña localidad de Zayas de Torres, sigue quemando etapas. Ya son más de 60 las hectáreas plantadas de viñedo con la previsión de superar las 100 el año que viene con la tercera y última fase. De forma paralela, la firma ya ha solicitado al Ayuntamiento de Langa de Duero –al que administrativamente pertenece Zayas– la licencia para la bodega. La idea es iniciar las obras en un año siempre con vistas a que la primera producción soriana de Protos salga al mercado en el 2026, según confirmó el director general de la firma, Carlos Villar.

Inicialmente, el plan diseñado por Protos contemplaba que la construcción de la bodega en Soria pudiera comenzar este año. Sin embargo, los trámites para la obtención de la titularidad de los terrenos necesarios se alargó más de lo previsto lo que imposibilitó que Protos pudiera presentar el proyecto a tiempo dentro de las ayudas que concede el Ministerio de Agricultura para el sector vitivinícola. En este contexto, Protos contempla que la bodega de Zayas se presente al programa de 2025 con vistas a que ya haya una resolución a mediados de año y entonces pueda iniciarse el desarrollo del proyecto.

Por este motivo, y en aras a contar con toda la cuestión administrativa resuelta para ese momento, Protos ha iniciado el proceso de obtención de la licencia municipal para la construcción de la bodega. En estos próximos meses, según explicó Villar, Protos tomará una decisión definitiva sobre el tamaño, la tecnología y el tipo de bodega que construirá en Zayas, teniendo en cuenta que, como mínimo, tendrá capacidad para medio millón de kilos de uva. La firma bodeguera adaptará el proyecto a las necesidades de mercado, por eso, en estos momentos, aún no pueden darse cifras reales de la inversión que se desarrollará en la Ribera del Duero soriana. «La inversión al final vendrá determinada por el tamaño final, tenemos idea, pero hay que esperar en función de como evolucione la situación del sector», explicó Villar.

El plan de desarrollo de Protos en Soria se inició en 2023 con la plantación de unas 28 hectáreas de viñedos y este año se completó la segunda fase con la incorporación de otras 36 hectáreas. En total ya son 64 a las que en 2025 se sumarán otras 45 para situarse en el entorno de las 110 hectáreas con las que contará el proyecto. Si el plan previsto se cumple, las primeras botellas de Protos con uva cultivada en Soria saldrán a la venta en el año 2026.

La llegada de Protos a la Ribera del Duero soriana se fraguó hace ya dos años cuando Zayas de Torre lanzó un concurso público para la explotación de algo más de 60 hectáreas destinadas a la producción de vino de la Denominación de Origen Ribera del Duero. Desde la firma ya explicaron que la situación y altitud de Soria posibilitan que estos terrenos sirvan como escudo frente a los efectos del cambio climático. «Se trata de una zona muy interesante por su calidad y porque es más fresca que las áreas tradicionales de la Ribera del Duero, al estar a más altura», aclaró el director general de Protos, Carlos Villar. De la misma forma se añadía «si Peñafiel –sede central de Protos D.O. Ribera del Duero– se sitúa a 750 metros sobre el nivel del mar, estos viñedos están por encima de los 1.000 metros, lo que nos va a ayudar a buscar calidad y diversificar riesgos independientemente de la climatología de cada año».