Buscan al joven desaparecido en el pantano de Soria en un abismo de 10 metros

El operativo de búsqueda para localizar al joven de 25 años, desaparecido la tarde del martes mientras se bañaba en el pantano de Soria se ha suspendido pasadas las 20.30 horas sin rastro de la víctima. El desconocimiento del punto exacto de la desaparición, la propia zona, con una profundidad de 10 metros, y la turbidez del agua en la que no se ve nada tras descender medio metro complican enormemente unas tareas de búsqueda liderado, desde esta mañana, por el Grupo de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GEAS), desplazados desde Valladolid. En la mañana del jueves volverán a sumergirse.

Las labores de búsqueda comenzaron la tarde del martes, poco después de las 18.00 horas. El joven desaparecido estaba en un hidropedal junto a su pareja a unos 500 metros de la orilla cuando se lanzó al pantano. Desapareció. Ella intentó auxiliarlo, pero no puedo hacer nada. Según informó la Subdelegación «ella no sabía nadar y él, no demasiado bien». La pareja reside en Tudela (Navarra) y trabaja en Tarazona. Aprovechando el festivo en la localidad turiasonense se desplazaron a pasar una jornada en el pantano soriano.

Durante la tarde del martes efectivos de la Guardia Civil y los bomberos de Soria estuvieron rastreando la zona durante más de dos horas hasta que anocheció sin encontrar rastro del desaparecido. También se revisó el perímetro del embalse.

Sobre las 22.30 horas llega a Soria el GEAS pero «al ser de noche y dado el peligro que entrañaba, no llegaron a sumergirse». En la mañana de ayer se reiniciaron las labores de búsqueda. Según fuentes oficiales en un primer momento se realiza una búsqueda circular a través del fondeo de una boya. Tomando como referencia ese punto se hacen búsquedas circulares ampliando el círculo de forma progresiva. Si los resultados no fueran positivos se pasará a la técnica de cuadrículas, acotando diferentes zonas y utilizando cabos lastrados para descartar zonas donde ya se ha realizado la búsqueda del cuerpo.

Desde la Guardia Civil ya se ha advertido desde un primer momento que la tarea de búsqueda «va a resultar complicada» por varios factores. En primer lugar porque se desconoce el punto exacto de la desaparición lo que va unido a la dificultad de tomar referencias en el agua. Además, las aguas son muy turbias. «Se tiene visibilidad sólo los primeros 50 centímetros de agua, por lo que la búsqueda es al tacto».

Tanto la pareja del desaparecido, de 24 años, como familiares del joven, están recibiendo atención por parte de los psicólogos de Cruz Roja. Por su parte el delegado del Gobierno en Castilla y León, Nicanor Sen, calificó ayer de «tragedia» la desaparición del joven en el pantano soriano y confió en que «próximamente» se pueda recuperar su cadáver, según recoge Ical.

No es la primera vez que ocurre un suceso parecido en el pantano soriano. El 6 de agosto de 2017 un vecino de Soria, natural de Gambia, de 22 años, se sumergió en el agua desde un patín acuático de alquiler y se hundió. Su cuerpo fue encontrado en la mañana del día 10 de agosto. Con anterioridad, en 2012, un ciudadano uruguayo, vecino de Burgos, desapareció también cuando nadaba en torno a un patín acuático. Su cuerpo fue encontrado el día 25 de agosto cuando su desaparición se había producido el día 2.