El asistente virtual que ayuda a descubrir los quesos de España
La organización interprofesional láctea InLac presenta esta herramienta en una feria en Zamora
Ya lo dice el refrán: ‘bebe vino y come queso y llegarás a viejo’. Cada vez comemos más queso y es mejor que bueno. Lo dicen las cifras y también las ferias, donde no falta en ningún certamen agroalimentarios de los que se celebran en la provincia de Soria y en el resto de Castilla y León. Entre ellos, el celebrado este pasado fin de semana en Zamora, la feria Fromago Cheese Experience, donde se ha subrayado la situación de España como uno de los principales países referentes en el mundo en la producción de quesos de calidad.
Los quesos españoles atraviesan actualmente un buen momento. Las exportaciones registradas en la primera mitad de 2024 superan a las materializadas a lo largo del mismo periodo del año anterior, cuando alcanzaron su máximo histórico tanto en volumen como en valor. Además, el consumo dentro del mercado doméstico crece de manera sostenida, según la Organización Interprofesional Láctea (InLac) durante su participación en la citada feria. De ella forman parte organizaciones agrarias como Asaja, Coag y Upa, entre otras.
Los quesos de origen nacional continúan expandiéndose fuera de nuestras fronteras, y los datos obtenidos hasta junio refuerzan esta tendencia al alza. En concreto, se han contabilizado 62.144,86 toneladas por valor de 409,20 millones de euros durante los primeros seis meses de 2024, un 15,5% y 12,5% más respectivamente frente al primer semestre de 2023, según la Agencia Española de Administración Tributaria (AEAT).
La interprofesional suscribe que este crecimiento certifica el liderazgo de España en mercados cercanos como Francia, Portugal e Italia y asimismo marca un hito en países estratégicos como Estados Unidos.
InLac sostiene que las cifras son buenas para el sector, que en Soria está bien representado, con dos queserías en Tierras Altas y una en Ágreda, además de un comercio única y exclusivamente de quesos en el mercado municipal de Soria.
Aún así, aún queda para que España se acerque a la media de la Unión Europea, donde el consumo asciende a 21 kilos por persona al año, si no fuera por la mayor presencia de quesos importados. «Y es que, en España, la importación de quesos aumentó un 10,7% interanual en 2023, hasta las 361.723 toneladas», según la AEAT, lo que evidencia que estos últimos están ganando terreno al origen nacional. De hecho, durante la primera mitad de 2024 se ha intensificado esta tendencia un 15% respecto con el mismo periodo del año anterior, al contabilizarse 199.295 toneladas importadas de queso hasta el pasado mes de junio. Países Bajos (88.672 toneladas en 2023) y Alemania (79.407 toneladas en 2023) destacan como los principales proveedores de quesos en el mercado español.
Aprovechando su presencia en el foro de Zamora, InLac ha mostrado su nueva herramienta de promoción para el mercado interno. Se trata de QI, un innovador asistente virtual que utiliza Inteligencia Artificial (IA) para ayudar a los consumidores a descubrir los quesos de España -entre más de 150 variedades que hay- que mejor van con su personalidad, ya que la IA está transformando nuestra manera vivir, trabajar e incluso de elegir alimentos.
Receta
Y es que no hay nada hay mejor ni más placentero que una buena tabla de quesos, sin importar el momento del día. El ofrecimiento de un abanico de buenos quesos a una visita es garantía que quedar bien y si ya se ofrece con un buen vino, Ribera del Duero, a ser posible, el éxito está garantizado. Huelga decir que el comensal puede ser uno mismo y entonces la elección será más que certera.
Otra opción es una crema de queso de fabricación propia que, si bien no tiene nada que ver con lo anterior, es una buena propuesta para elaborar con niños como ayudantes.
La elaboración es tan fácil como mezclar mantequilla y harina en una sopera pequeña y remover la mezcla. A continuación, vamos añadiendo leche hasta que la mezcla se convierta en una crema espesa. Otra opción es utilizar crema de leche o nata. Cuando esté caliente echaremos el queso en porciones pequeñas o en trocitos y lo batiremos hasta que la mezcla quede homogénea. Un poquito de sal, en función del queso que hayamos elegido, y la crema estará lista. Hay quien le añade alguna especia, pero eso ya es a gusto del consumidor.