El estado de 26 kilómetros de la A-15 en Soria obliga a actuar en su estructura

El Ministerio de Transportes está trabajando en un proyecto para abordar una rehabilitación de algo más de 25 kilómetros de la Autovía de Navarra (A-15) en el tramo comprendido entre Almazán y Radona. El motivo es la mala situación del firme que requerirá tanto actuaciones en superficie como estructurales, según explica el propio Gobierno central. Una actuación que se hace necesaria a pesar de que afecta a dos tramos que apenas tienen más de una década de vida.

A través de una respuesta parlamentaria, que preguntaba por las obras desarrolladas este verano y el anuncio de la necesidad de hacer un reforma «integral» de la vía de la autovía de Soria a Madrid, desde el Gobierno se explica que la reforma «ya está en marcha» a través de la «redacción de un proyecto de rehabilitación superficie y puntualmente estructural del firme de la autovía A-15». La zona afectada es la que se sitúa entre el punto kilométrico 13 y el 39 lo que se corresponde con el tramo Radona-Sauquillo del Campo-Almazán, según consta en la citada respuesta. Además, desde el Gobierno se indica que «en dicho proyecto se están analizando las patologías del firme para poder definir en detalle la solución de rehabilitación necesaria en este tramo».

A finales del pasado mes de abril el subdelegado del Gobierno en Soria, Miguel Latorre, ya advirtió que antojaba necesario «reforma integral a medio plazo» de la autovía hasta Madrid debido en gran medida a la presencia de numerosos baches en el recorrido de la A-15 a su paso por Soria. Precisamente, los baches provocaron que durante este verano la autovía haya estado limitada en durante varias semanas a 70 por hora debido a las imperfecciones del firme. Para repararlos entre los meses de julio y parte de agosto se llevó a cabo una actuación de emergencia que afectó a unos 35 kilómetros de la A-15 y que tuvo un coste de casi 4 millones de euros. Aquella actuación se justificó dentro una partida más amplia que afectaba a más territorios para la mejora y la rehabilitación del firme con el objetivo de garantizar la seguridad vial y las condiciones de seguridad.

Cuando finalizaron las obras de emergencia, Latorre indicó que era una intervención «puntual» y que la previsión que manejaba el Gobierno era «realizar una evaluación y un análisis» del trayecto «para analizar todo el terreno y ver que posibles soluciones se pueden adaptar».

Los tramos en los que se tienen previsto efectuar las acciones de rehabilitación apenas tienen poco más de una década de vida, un tiempo escaso y además teniendo en cuenta que el volumen de tráfico, siendo importante, es sensiblemente inferior a otras vías del estado.

Tal y como está explicado, la actuación en la que está trabajando el Ministerio de Transportes comprende un tramo de 26 kilómetros en la A-15 aproximadamente entre las localidades de Radona y Almazán. Estos 26 kilómetros formaban parte, durante las obras de construcción de la autovía, de dos tramos. Por orden cronológico de apertura, el primer fue el trayecto entre Radona y Sauquillo del campo con unos 14 kilómetros y que tuvo un coste de 40 millones de euros. Este tramo se puso en servicio en diciembre de 2010, es decir, esta a un par de meses de cumplir los 14 años de funcionamiento. Este tramo fue inaugurado bajo tutela del PSOE en el Gobierno y bajo mandato de José Blanco en el entonces ministerio de Fomento. En cuanto al Sauquillo del Campo-Almazán, aunque consta de un total de 16 kilómetros, en su momento se optó por una apertura parcial que correspondía a 13 de sus 16 kilómetros permitiendo eliminar las peligrosas rotondas que se habilitaron durante su construcción. En esta caso la puesta en servicio correspondió a un Gobierno del PP y al frente del Ministerio de Fomento estaba Ana Pastor. Este tramo costó 45 millones y data de noviembre de 2013, es decir, que cumple ahora 11 años.