El alcalde de Soria defiende el alza del IBI por la suma de servicios
Soria tiene «las tasas impositivas más bajas de la tabla, incluido el IBI»
Asegurar los ingresos para garantizar servicios e inversiones. Es el razonamiento del alcalde, Carlos Martínez, en torno a la subida del IBI que planteó hace unos días, un ajuste según el IPC que los populares rechazaron en la víspera y que argumentaron sobre la base de su tradicional repudio a las elevaciones y de un informe del Consejo General de Economistas. Un documento cuyo desglose por parte del PP el regidor puso en duda, considerándolo interesado y que no refleja todo su contenido.
Martínez lamentó que el PP se oponga a «lo que todo el mundo entiende como normal». Incluso los populares, «desde el punto de vista empresarial, esto que defienden tanto a las empresas, son plenamente conscientes que con el cambio de año la regulación en torno al IPC es algo absolutamente normal en cualquier empresa, incluso para los trabajadores, aunque les cueste». El alza del IBI es «una actualización, que prácticamente tener que ser por ley y regular para que no tener que estar permanentemente en este debate estéril de si se sube o no se sube». Y es que, «es la actualización de los precios, es que no estamos hablando de otra cosa».
«Es tan tradicional lo que hacemos dentro de la lógica», continuó el alcalde a preguntas de los medios poco antes del vino español del Ayuntamiento con motivo de San Saturio, «como tradicional la oposición que el PP, pero ojo, sólo si no gobiernan, porque vamos a hablar sólo de Salamanca, es la [ciudad] del presidente de la Junta de Castilla y León, veréis la actualización que tienen del IBI, permanentemente y todos los años, no hay más polémica ni más debate». En este sentido, el PP de Soria «no sabe romper inercias».
Martínez se refirió también al informe de los economistas, esgrimido por los populares, a los que acusó de «retorcer los datos para que te encajen en tu argumentario». En su comparecencia crítica del martes, los concejales del PP omitieron señalar «cuál es la cuota media que tiene la ciudad de Soria» de IBI, que está «de la mitad para abajo» en la tabla de las ciudades españolas. En todo caso, hay que ver «la repercusión en servicios que prestamos a la ciudadanía con esos recursos, porque esto va de esto, significa abrir Santa Clara, abrir mañana el trinquete, generar y desarrollar inversiones y tener actividad cultural y deportiva». Algo que «no se hace desde lo etéreo, se hace precisamente buscando ingresos municipales que puedan abordar el proyecto de una capital de provincia como el que tenemos en marcha».
«Si todo esto lo hacemos además desde las tasas impositivas más bajas de la tabla, incluido el Impuesto de Bienes Inmuebles, pues yo creo que la gestión no es mala», remachó Martínez, quien invitó a comparar las cuotas de Soria con las de otros municipios, incluido el alfoz para comparar qué servicios prestan estos con sus ingresos.
Por otra parte, el alcalde se refirió al proceso de negociación de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT), de cuya mesa de negociación se levantaron los sindicatos, que buscan un documento más allá del de mínimos y de estabilización de 79 empleos que presenta el equipo de Gobierno. «Estamos en el horizonte de hacer una negociación en el corto, en el medio y en el largo plazo, en el que los tiempos y los pasos los marcan también las responsabilidades y las obligaciones que tenemos que cumplir con la regulación nacional laboral», recordó. «En toda negociación hay tensión, lógicamente, y en toda negociación hay que entender a la contraparte para poder llegar a ese punto de encuentro. Vamos a ver si al final somos capaces de llegar a ese punto de encuentro, aunque nosotros tenemos que seguir avanzando en el reconocimiento del trabajo y del derecho de todos los trabajadores, pero también en las necesidades de dar cobertura a la prestación de un servicio a la ciudadanía, que es para lo que estamos y, en ese punto de equilibrio, ver si somos capaces [de llegar a un acuerdo], yo soy optimista», aseguró Martínez.