El obispo de Osma-Soria pide a los políticos que trabajen por la paz

Actos religiosos solemnes en la festividad de San Saturio, con la lástima de una jornada inestable, tanto que por la tarde se suspendía la procesión con las reliquias del santo por las calles de la capital. Un encuentro con los fieles y devotos del santo que tuvo que ceñirse a las eucaristías en la concatedral. Por la mañana, el obispo, Abilio Martínez Varea, se hacía eco en su homilía de los temas de actualidad más acuciantes, al hilo de detalles menos dramáticos acaecidos en Soria. Y es que el magnífico claustro volvió a recuperar la procesión con la reliquia y el clero, tras una «restauración profunda». Y la ermita junto al Duero reabre. Precisamente en la visita inaugural estuvo el obispo y su homilía giró en torno a las «tres intercesiones» que hizo a San Saturio. La principal, que la política trabaje por la paz.

Y es que cuando el Papa Francisco hablaba de una «guerra mundial que se libraba a trozos» pudo sonar exagerado, hasta que los conflictos de Ucrania y Oriente Próximo han desmentido tal pensamiento escéptico. «Estamos en un escenario de guerra muy preocupante», señaló el obispo. «Poner fin a la guerra es un deber de los responsables políticos a través del diálogo y de las negociaciones». En este sentido, «la paz debería ser hoy su principal prioridad». Una paz que no sólo debe remitirse a las «estructuras», sino también a la «responsabilidad personal».

La segunda intercesión tuvo que ver también con los políticos, «encargados de guiar a la sociedad civil» hacia el bien común, nacido de la «dignidad e igualdad de las personas». Por último, el obispo pidió «hombres y mujeres de esperanza», teniendo en cuenta el próximo año jubilar de la esperanza.