Alzheimer Soria lidera una investigación sobre los efectos de las terapias no farmacológicas
El proyecto está coordinado por el doctor Diego Fernández Lázaro quién se encargará de divulgar los resultados
La Asociación de Enfermos y Familiares de Alzheimer Soria liderará un proyecto de investigación para poner en valor los datos recabados a través del programa de detección precoz y aportar a investigadores y científicos información fehaciente sobre la eficacia de las terapias no farmacológicas y sobre algunas de las características de esta enfermedad.
La gerente del colectivo, Carmen José Ruiz, explicó que tanto la neuropsicóloga como la terapeuta ocupacional del centro son las encargadas de volcar en una aplicación informática, denominada ‘Alberta’, los datos de aquellos pacientes que han pasado por el centro para recibir terapia y que cuentan con una valoración de inicio y seguimiento, informa Ical.
Una vez que se vuelquen los datos se realizará una comparativa y una puesta en valor de los mismos con ayuda del doctor y profesor del del Departamento de Biología Celular, Genética, Histología y Farmacología de la Universidad de Valladolid, Diego Fernández Lázaro, quien coordina el trabajo de investigación y realizará la correspondiente publicación científica. “Vamos a hacer un estudio comparativo de los pacientes que han pasado por el centro que tienen una valoración de inicio y de seguimiento con aquellos que no recibieron terapias no farmacológicas”, resaltó.
Actualmente se trabaja en el diseño de la plantilla para recabar datos; se detecta qué es significativo incluir en el estudio; y posteriormente, toda vez que se tengan los datos volcados, se analizará el proceso de la enfermedad en aquellas personas que recibieron tratamiento no farmacológico y aquellas que aún estando diagnósticas no lo recibieron.
A pesar de que aún no se dispone de conclusiones pues el estudio está en fase “incipiente”, desde Alzheimer Soria se atreven a aseveran que de las 200 personas que son evaluadas en la Asociación anualmente con el programa de detección precoz entre el 80% y el 90% desarrollan una demencia. Sin embargo, esté dato no está registrado como tal. “La mayoría de las personas que pasan por el cribado desarrollan una demencia. Gracias al estudio lo sabremos de forma fehaciente”, indicó.
La gerente de Alzheimer Soria también apuntó que se tienen dudas sobre si realizar la comparativa con aquellos pacientes diagnosticados antes del Covid o después, ya que la pandemia afectó muchísimo a los enfermos que tienen perdida la capacidad de razonamiento y de memoria. “Explicarles lo que era una pandemia fue muy complicado y que retuvieran la explicación también. Fue difícil razonar con ellos. En ese período estuvieron metidos en casa sin salir, sin acudir al centro y sin llevar esa estimulación cognitiva continua”, indicó.
Alzheimer Soria realiza anualmente entre 150 y 200 valoraciones anuales. Es tal la cantidad de pacientes que reciben derivados de Atención Primaria y Especializada que físicamente no tienen sitio para guardar esa cantidad de expedientes acumulados desde 2003. “Nosotros valoramos a personas que nos deriva Primaria y Especializada que ya están diagnosticadas y vemos qué funciones conserva para determinar la terapia”, resaltó.
Desde Alzheimer Soria reivindican la aprobación de un Plan Nacional de Alzheimer, tal y como también exige la Organización Mundial de la Salud. Ese Plan, según Carmen José Ruiz, debe contemplar que se realice el diagnóstico precoz de la Enfermedad de Alzheimer (EA), porque “sirve para trabajar en el deterioro y frenarlo cuando tiene calidad de vida”.
Asimismo, señaló que este futuro plan deberá abrir nuevas líneas de trabajo, porque aunque se avanza “despacio” la EA no tiene cura. “Llevo 30 años trabajando en esto y ahora se investiga más. El cerebro es la parte complicada del cuerpo. Conocemos como funciona cuando está sano en un porcentaje muy bajo pero es más difícil todavía cuando esta enfermo”, consideró.
También reconoció que, de momento, no se puede detener el curso de la enfermedad ni cronificarla y que los datos sobre la incidencia de la misma a corto plazo son “desalentadores.“ ”Los tratamientos farmacológicos que hay en el mercado no son muy eficaces pero sí se pone en valor los efectos de los tratamiento no farmacológicos. El Plan Nacional debe servir para coordinar y aunar esfuerzos y dotar a la población de recursos asistenciales y que se apueste por la investigación”, concluyó.