Ganadería
El sector porcino cifra en unas 30.000 las plazas de cebo que perderá Soria
Aporso señala que la nueva normativa europea de bienestar animal «tensionará» el mercado y supondrá un aumento de los precios ante un descenso de la oferta
La nueva normativa europea de bienestar animal, que comenzará a aplicarse en España a partir de marzo del año que viene, supondrá un descenso de entre el 10% y el 20% de las plazas de cebo de porcino, lo que conllevará un descenso de la oferta y en consecuencia un incremento de los precios de mercado. Desde la Asociación Provincial de Productores de Ganado Porcino de Soria, Aporso, su presidente, Miguel Ángel Ortiz, aseguró que esta nueva normativa, que no comparte el sector, «tensionará» el mercado y tendrá sus consecuencias. Para empezar, conllevará que en la provincia de Soria se pierdan unas 30.000 plazas de cebadero de cerdo, aplicando una reducción media de plazas del 15% a las 200.000 que existen actualmente.
Ortiz puso como ejemplo: «Un ganadero con 1.000 plazas se verá reducido en un 20%, por lo tanto serán 800. Y esto tendrá efectos económicos y también estructurales porque el mercado español tiene buena demanda, y también buenos precios, por que sin ellos no podríamos pagar todos los incrementos sufridos». El presidente de Aporso aseguró que los cerdos que se crían en Soria van a tener «problemas de dónde se ceban y cómo se ofrecen al mercado, que ya es precario en la oferta», puntualizó, dada la alta demanda.
«No solo las granjas se verán tensionadas, sino los precios», recalcó durante la jornada informativa a los empresarios del porcino organizada ayer por Aporso sobre la adaptación de las granjas a las nuevas exigencias sobre bienestar animal, que aborda aspectos como la densidad de espacio disponible por animal y nuevas condiciones respecto a sus comederos, alimentación y aspectos ambientales, entre otros. La ponencia fue ofrecida por el gerente de la empresa Proyecta 3, Pedro Bermejo.
Ortiz lamentó que se aprueben estas políticas sin contar con el sector, que se verá plenamente afectado, «y además el mercado lo va a notar». España es actualmente el tercer productor mundial de porcino, «y que se tensione no vendrá bien a nadie, ni a ganaderos ni a sociedad», enfatizó Ortiz, si bien, insistió, «el sector porcino es muy resiliente» y se adaptará.
Señaló que reducir plazas para adaptarse a la normativa «es fácil», más complicado será ampliar instalaciones para mantener el número de animales, ya que hay que tener proyecto y solicitarlo, «y esos expedientes se están alargando varios años». Las nuevas granjas que se están instalando ya aplican la normativa y se harán más, «pocas» a su modo de ver, añadió, «porque hay mucha base territorial. Somos importadores de nitrógeno para nuestros campos, porque no es suficiente con los purines que tenemos, cabe más», mencionó.
Sobre el incremento de aranceles que pueda imponer Estados Unidos tras la victoria de Donald Trump Ortiz se mostró prudente, «a ver en qué queda».