Las «oportunidades de viaje» se mantienen en el mapa concesional
El Gobierno defiende el nuevo modelo, en el que las Comunidades Autónomas «asumirán los tráficos de su competencia» que ahora sirven concesiones estatales
«Con el mapa concesional se mantienen los tráficos actuales y ningún viajero perderá oportunidades de viaje». Es la conclusión principal de la respuesta del Gobierno a una pregunta parlamentaria del senador popular Javier Jiménez Santamaría acerca del nuevo mapa del transporte por carretera. Las paradas ‘dudosas’ «serán paradas que pasarían a ser servidas desde el ámbito autonómico, para lo cual desde el Ministerio se pondrán a disposición de las Comunidades Autónomas 40 millones de euros, 25 de ellos en subvenciones directas, para que las Comunidades Autónomas asuman los tráficos de su competencia, que actualmente se vienen prestando a través de concesiones estatales de largo recorrido». El Gobierno insiste así en el modelo que en el caso de Soria conllevaría la eliminación de 39 paradas en 33 municipios. Para los populares, la clave es la financiación, no las subvenciones que tendrían un carácter temporal.
«El Gobierno, mediante el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, está trabajando en el impulso del sistema de transporte de viajeros por autobús, a través de la actualización del sistema concesional de autobuses de competencia estatal y su coordinación con los mapas autonómicos correspondientes», señala el Gobierno, que habla de un sistema que «pone el foco en robustecer y mejorar la cobertura y servicio que se presta a través de la coordinación con las actuales redes de transporte, donde cada administración ofrece aquellos servicios de su ámbito natural con una visión integrada en cuanto a horarios y conexiones con el resto de servicios». «En este sentido», prosigue, « desde la red estatal se atiende la demanda de viajeros de más largo recorrido entre Comunidades Autónomas, de competencia estatal, conectando de manera más directa los principales núcleos de población, coordinando los servicios con las redes de transporte autonómico de más corto recorrido dotándola de capilaridad, consiguiendo la vertebración del territorio, reduciendo los tiempos de viaje y mejorando la oferta disponible». Para el Gobierno, «se trata de una evolución necesaria».
El objetivo es que el autobús «sea aún más efectivo, cómodo y competitivo en este tipo de viajes respecto al coche privado, y lo haga dando respuesta a las necesidades del ciudadano, potenciando la interconexión con las redes autonómicas de transporte por carretera y respetando así el actual marco competencial».
A continuación, el Gobierno llama a la cooperación con las Comunidades Autónomas. Es necesario que «la actual colaboración» con ellas «para coordinar las redes de ambas administraciones, muchas de ellas en proceso también de definición, se intensifique y se pueda acompañar, donde sea necesario, de los mecanismos de compensación que permitan a las Comunidades Autónomas integrar en sus redes aquellos tráficos internos de su competencia, que aún se vienen prestando a través de concesiones estatales de largo recorrido, avanzando en las sinergias que van a redundar en una mejora de la calidad del servicio, y con el principio esencial de que ningún ciudadano pierda las oportunidades de viaje de que actualmente dispone».
El Gobierno recuerda que «se ha optado por un proceso de definición del mapa totalmente participativo». En este sentido, «en una primera fase manteniendo reuniones con las Comunidades Autónomas, con el sector, organizando talleres de trabajo con la participación de empresas, sindicatos etc, o elaborando cuestionarios para el envío de comentarios y sugerencias y, especialmente, en la segunda fase, en la que ya se están celebrando reuniones con todas las Comunidades Autónomas, poniendo a disposición la documentación técnica correspondiente que se ha enviado específicamente a los departamentos autonómicos responsables para analizar tráficos, paradas, oferta, etc, en un trabajo conjunto y habitual entre administraciones».