AMAR
«No cambiamos y, si lo hacemos, a peor»
La asociación AMAR apela a la responsabilidad de los ciudadanos a la hora de tirar, como se debe, guantes y mascarillas, que aparecen arrojados al suelo con el peligro que suponen los microplásticos para los humedales y el hábitat de animales y personas
«No cambiamos y si lo hacemos es a peor». Proviene de la asociación AMAR, Amigos de los Mamíferos, Anfibios y Reptiles, y encuentra su aval en las imágenes que ilustran esta información y otras que pueden verse tanto en la capital como fuera de ella. Por un lado se apela a extremar la higiene debido a la pandemia y para evitar la propagación del virus y, por otro, se ven fotografías como éstas, guantes en el suelo y hasta mascarillas tiradas en plena rúe. «Y es que no solo hay que protegerse del Covid-19 sino que también hay que ser responsables y cívicos y proteger otras cosas, algo que parece que mucha gente olvida y lo que es peor, se desentiende», indica Manuel Meijide, presidente de la asociación.
En este caso concreto los guantes aparecieron en el pequeño humedal que hay en el Bosque Infantil, cerca del vivero de empresas, «guantes de plástico de los que se degradan rápidamente y se convierte en microplástico y pasa sin más al organismo de los animales». ¿Cómo les perjudica? Depende de las especies, «no hay estudios al respecto pero de lo que sí los hay es de que ya hay microplásticos en el agua potable», comenta Meijide, apuntando que esta sustancia invade todo el ciclo del ecosistema. Este humedal, al igual que otros de la provincia, son el hábitat de numerosas pequeñas especies, como sapos y ranas que en determinadas épocas pueden verse a cientos.
Probablemente los guantes procedían de los que los ciudadanos se quitan después de estar supermercados cercanos y arrojan a la papelera a la salida. «¿Pero de quién es la responsabilidad, de la gente, del supermercado, del servicio de limpieza de Soria?», se pregunta el presidente de la asociación, partidario de hablitar alguna medida.
«El impacto visual es grande, porque se vieron cubriendo el suelo, una alambrada cercana, pero es que la degradación nos afecta a todos, porque el guante va a la alcantarilla y de ahí al río», dice el presidente de la asociación, a la que han llegado «numerosos documentos gráficos» de diferentes zonas de la ciudad y de pueblos circundantes.
Prácticas como ésta son, en opinión de la asociación, «un claro ejemplo de nuestra sociedad que utiliza como medida el ‘me da igual, ya lo recogerá otro, no vaya ser que me contagie’. Pues señores, esto no funciona así. Es deber de todos nosotros, los de a pie y los de arriba el solucionar estas situaciones tan perjudiciales para nuestro medio ambiente, ese medio que nos protege (aunque muchos no lo saben o no se lo creen) de numerosas enfermedades, epidemias y pandemias».
La asociación celebra este 2020 su quinto aniversario, lo que conmemoró con una visita a un humedal en en un año lleno de vida para los humedales. «Posiblemente sea el mejor año de la década para estos espacios y para los anfibios que hay», debido a la acumulación de agua y, además, a la anulación de personal por el campo debido al confinamiento. Meijide puso como ejemplo la laguna de Judes, que llevaba 15 años prácticamente seca «y ahora está que se desborda».