Heraldo-Diario de Soria

GLORIETA DE MARTÍN DE TAPIA

"Quedamos en la glorieta Martín de Tapia". "¿Y dónde está eso?"

Soria dedica al tratadista musical un lugar emblemático en el parque de la Dehesa

Glorieta de Martín de Tapia.- MARIO TEJEDOR

Glorieta de Martín de Tapia.- MARIO TEJEDOR

Publicado por
P. PÉREZ SOLER
Soria

Creado:

Actualizado:

"¿Dónde quedamos?". "En la glorieta de Martín de Tapia". "¿Y dónde está eso?". Pruebe a elegir este lugar cuando quede con otra persona. Con bastante probabilidad, su interlocutor desconocerá dónde se encuentra está céntrica glorieta en Soria, aunque lo más seguro es que haya pasado junto a ella muchas veces. Lo más probable es que ya hayan quedado en ella alguna vez, si bien con otra denominación mucho más conocida. Es más, el enclave en cuestión es de los lugares más conocidos de Soria: hablamos de la glorieta del Árbol de la Música.

El nombre de esta rotonda de la Dehesa homenajea a un músico soriano, el bachiller Martín de Tapia Numantino, un tratadista musical, autor del 'Vergel de música spiritual, speculativa y activa', publicado en El Burgo de Osma, en el año 1570. Así lo detalla quien fuera cronista de la ciudad, Miguel Moreno, en su libro Todas las calles de Soria. Moreno compara a este "músico eminente" con Soto de Langa, aunque éste estuvo al frente de la Capilla Pontificia.

Sobre la figura del músico, el cronista dice que él mismo añadía Numantino a su nombre, Martín de Tapia, y que contemporáneos suyos, como Baltasar Ruiz o Gay, elogian "en alto grado la ciencia musical de Tapia Numantino”.

El músico ofreció la obra 'Vergel' de música al obispo Tello de Sandoval, que estuvo al frente de la diócesis desde 1567 a 1578 y era el obispo en el momento en que se editó la pieza. El cronista de Soria da cuenta de un estudio publicado en Celtibera con el título 'Un tratadista musical: el bachiller numantino Martín de Tapia, cuyo autor fue José Subirá.

No menos célebre que la pieza musical es el emblemático Árbol de la Música que durante años ocupó el centro de esta placilla, un olmo plantado en 1611 al que la grafiosis segó la vida hace algo más de tres décadas. Su lugar lo ocupa desde 1997 un castaño de flor rosada.

 

tracking