La Junta restaura retablos de cinco iglesias por 88.000 euros
La Junta ha intervenido en lo que va de año en piezas de La Póveda de Soria, Ontalvilla de Valcorba, Aldealafuente, Vadillo y Matalebreras
La Junta ha invertido en lo que va de año cerca de 88.000 euros en la restauración de retablos en iglesias. De este modo, han mejorado su conservación, a través de la intervención de la Consejería de Cultura y Turismo, retablos de las iglesias de La Póveda de Soria, Ontalvilla de Valcorba, Aldealafuente, Vadillo y Matalebreras, por un importe total que asciende a 87.903,42 euros.
La delegada territorial, Yolanda de Gregorio, tuvo ocasión ayer de comprobar una de estas intervenciones, concretamente en la iglesia del Salvador de La Póveda de Soria, acompañada del delegado de Arte Diocesano, José Sala; del párroco, Javier Santa Clotilde, y del jefe del Servicio Territorial de Cultura y Turismo, Carlos de la Casa. Las obras en el retablo mayor del templo, ya concluidas, han supuesto una inversión de 18.136,69 euros, acometida por Pablo Luis Yagüe.
Se trata de un retablo de grandes dimensiones, del siglo XVII en transición al barroco, con tallas de Cristo Salvador sentado sosteniendo un orbe y la Asunción de Nuestra Señora y en el ático la figura de Dios Padre con el orbe y con escenas bíblicas, en bajo relieve de madera policromada sobre tabla pintada en sus laterales. En las esquinas de su sotobanco se ubican dos escudos de piedra policromados.
Debido a sus grandes dimensiones, su restauración se centró en la limpieza superficial, tanto del retablo como de sus tallas policromadas que se encontraban más afectadas por la suciedad y polvo. Además, se realizó la sujeción de las tablas policromadas con bajo relieves de las calles laterales y de la predela y se retiraron repintes de intervenciones anteriores. Por último, se llevó a cabo la reintegración cromática en faltas y lagunas con aplicación de una protección final a todo el conjunto.
En la iglesia parroquial de la Invención de la Santa Cruz, en Ontalvilla de Valcorba, se han restaurado los retablos de San Miguel y el de la Virgen románica, a excepción de la talla de la Virgen, de factura más reciente que el retablo, ambos de madera policromada y de pequeño formato.
Inmaculada Medina centró el trabajo en la restauración de las policromías de las tallas y de los dorados y policromías de su arquitectura, así como en su limpieza superficial y retirada de depósitos y la consolidación integral de sus elementos y reintegración de volúmenes.
En Aldealafuente se restauró el retablo norte de la iglesia de la Asunción de Nuestra Señora, que tiene la particularidad de ser de piedra caliza policromada con base de color crema y de estilo plateresco del siglo XVI, frente a los demás retablos del templo, que tienen en común ser barrocos y de madera, con o sin policromías. El retablo aloja la representación de San Bartolomé, la de Cristo resucitado saliendo del sepulcro y la de San Andrés, y en la calle superior aparecen Santa Catalina, Cristo crucificado con San Juan y la Virgen María a su lado, y Santa Bárbara.
La actuación, realizada por Cristina Quintana, consistió principalmente en la limpieza superficial y restauración de policromías de los alto relieves de piedra del retablo y de los dorados de arquitectura; retirada de intervenciones previas de morteros; reintegración de pieza desprendida en sotobanco; entonado de faltas y protección final de dorados y películas pictóricas.
En Vadillo se restauró el retablo mayor de su iglesia parroquial de la Natividad de Nuestra Señora. Se trata de un retablo barroco de grandes dimensiones, con lienzos pintados en sus calles laterales y columnas salomónicas profusamente decoradas con motivos vegetales, explican fuentes de la Junta. La limpieza superficial con retirada de polvo y depósitos, eliminación de repintes de intervenciones anteriores, consolidaciones con estucado, nivelado de faltas de arquitectura, reintegración de volúmenes, entonado final y reintegración pictórica y protección final fue realizada por Inmaculada Medina.
Por último, en la iglesia de Matalebreras se intervino en el retablo de la Dolorosa, de pino, policromado y arquitectura dorada de pequeñas dimensiones, con un solo cuerpo central en el que se aloja la talla de la Dolorosa y un ático con talla de la Virgen con Niño, y en los laterales las tallas de San Ramón nonato y Santa Bárbara.
En este caso, y debido a su falta de estabilidad por pérdidas de secciones de madera, la restauradora Cristina Quintana se centró en su estructura, tanto en su base como en su sujeción trasera, reintegrando con madera nueva en su estructura interior y consolidando con maderas desprendidas y abandonadas en su base e interior. También se estucó y nivelaron faltas de arquitectura y se procedió a su limpieza general de polvo y suciedad; se eliminaron repintes; se reintegraron volúmenes, la película pictórica y dorados de arquitectura; y se aplicó una capa de protección final.
Todas estas actuaciones de restauración de bienes muebles han sido coordinadas y supervisadas desde el Servicio Territorial de Cultura y Turismo de Soria.