Nuevas pruebas confirman la presencia del hombre prehistórico en la comarca

 

Las prospecciones realizadas en el paraje de la Cañada Madre por un equipo multidisciplinar, integrado por 12 estudiantes de arqueología e historia de las universidades de Zaragoza, Granada, Salamanca y Málaga, confirma la presencia del hombre prehistórico en el Moncayo. Los nuevos hallazgos de objetos utilizados desde el Paleolítico vienen a confirmar las hipótesis del sacerdote de Dévanos José Hernández quién en 1925 ya aseguró que estas poblaciones habitaron las tierras del Moncayo.

Las prospecciones se han realizado en la Cañada Madre, entre las localidades de Vera de Moncayo y El Buste. Una zona que los arqueólogos califican como una muestra de los asentamientos humanos que poblaron las faldas del monte y donde se han encontrado evidencias que van desde el Paleolítico Medio hasta la Edad Moderna. Oscar Bonilla, uno de los tres directores de los trabajos, asegura que el Moncayo sigue siendo el desconocido de la prehistoria, «la Cañada Madre es una muestra de toda la comarca, hacer divisiones geográficas no tiene sentido».

Durante estos trabajos se han encontrado objetos que pertenecieron al Paleolítico medio, «se trata de hallazgos puntuales que se encontraban en otro tipo de yacimientos, herramientas de aquella época como pueden ser utensilios de silex». Pero además de eso, se ha constatado «un abrigo cueva del Neolítico, dos abrigos de la Edad de Bronce, un yacimiento de la misma época, una importante zona de explotación de mineral de la época Celtíbera, siglo I ó II antes de Cristo, y cinco nuevos yacimientos romanos». A todos estos hallazgos se suma el de un yacimiento de la Edad de los Metales encontrado a última hora. Pero aún hay más, la Cañada Madre fue un lugar idóneo para el asentamiento otras culturas como la musulmana, visigoda, medieval y moderna.

 

 

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