La planta de Resinas tendrá una plantilla de 15 operarios

Entre 15 y 20 personas configurarán la plantilla de la fábrica de Resinas Naturales en Almazán, que está previsto que comience a funcionar en el mes de junio. La firma trabaja ahora en la formación de esta plantilla para la que se contará con empleados de la zona. El proceso de selección se ha realizado en Almazán y está casi definido, según explicó que el director de Resinas Naturales, Francisco Revilla. Esta plantilla estará configurada por un gerente, personal de administración y personal destinado al proceso de producción.

La empresa completará en las próximas semanas los contratos con los resineros que abastecerán a la planta adnamantina en la presente campaña. Más de 120 resineros están preparados para comenzar a trabajar en el monte. Una treintena son de Almazán y el resto pertenecen a la zona de Tardelcuende, Quintana Redonda, Berlanga de Duero, Bayubas e incluso se cuenta con resineros de la zona burgalesa de Hontoria del Pinar. La empresa cuenta con más demanda de resineros que están dispuestos a trabajar con la firma,  aunque parece poco probable que se puedan incorporar porque la actividad está a punto de comenzar.

 

Los resineros han comenzado a preparar los pinos, con los trabajos de derroñe, con el objetivo de poder comenzar con la campaña dentro de unas semanas, aunque la actividad dependerá de las condiciones meteorológicas, con temperaturas elevadas que permitan a los pinos poder extraer la primera resina.

Las obras de la construcción de la planta de Resinas Naturales avanzan a buen ritmo y se espera que estén concluidas al inicio de verano. Está ubicada en una parcela del polígono industrial de Almazán. Este proyecto empresarial ha sido una de las principales apuestas del alcalde de la población, José Antonio de Miguel Nieto, quien  ha favorecido la instalación de la fábrica, con el objetivo de impulsar  la actividad resinera en la comarca   que dispone de una importante masa forestal que se puede dedicar a la resina.

La buena respuesta de la mano de obra resinera en la zona muestra el interés y las expectativas de los vecinos que han recuperado una actividad que se había perdido desde hace décadas. La empresa pretende aglutinar a más de 200 resineros cuando la planta esté en funcionamiento en sucesivas campañas.

Resinas Naturales prevé una transformación de 1.500.000 kilos de resina, por encima de las perspectivas iniciales. La entrada en funcionamiento de la planta de Almazán permitirá a la empresa ampliar el volumen de resina tratada, ya que en la actualidad la fábrica que tienen en Cuéllar (Segovia) se encuentra prácticamente al límite de su capacidad.

La empresa ha invertido cerca de dos millones de euros para la construcción de una planta que será sostenible y que será eficiente.  El trabajo dentro de la destilería permitirá obtener un producto de segunda transformación, modificado de la colofonia que se empleará para la elaboración de pegamentos, adhesivos, pinturas y cosméticos. Tal y como han avanzado los responsables del proyecto, se pretende obtener un producto  que tenga un precio competitivo para poder venderlo, incluso en países fuera de España. Con este proyecto, Resinas Naturales pretende  lograr una viabilidad a largo plazo de la industria que está basada en los recursos naturales que ofrecen los pinares y  la sostenibilidad de los mismos.