Carbures invierte 22 millones y creará 50 empleos en la planta de piezas de fibra de carbono en El Burgo

Carbures fabricó ayer su primera pieza de fibra de carbono para coches en El Burgo de Osma con la tecnología que ha desarrollado para implantar un sistema productivo automatizado. La compañía demostró que cuenta con la maquinaria puntera para convertir la planta burgense en su ‘cuartel general’ dentro del sector de la automoción y un centro de excelencia y referencia mundial, por el que pasarán todos los avances e investigaciones que desarrolle la firma en la fabricación de piezas en fibra de carbono en series largas para coches.

El consejero delegado de Carbures, José María Tarragó, y el presidente de Carbures, Rafael Contreras, presentaron el funcionamiento del primer lineal que se ha instalado en el mundo para hacer frente a un proceso productivo que va a revolucionar el sector de la automoción y en el que la compañía gaditana ha trabajado durante más de seis años. Con este proyecto industrial, Carbures abastecerá al mercado, por una parte, de la tecnología, es decir la venta de la maquinaria que permite hacer las piezas, y, por otro lado, de las piezas para firmas de automoción con las que llegue a acuerdos comerciales.

Estas piezas son las que hará Carbures en su planta de El Burgo de Osma, una nave de 2.600 metros cuadrados, cedida por el Ayuntamiento, en la que ya se han invertido 22 millones de euros y que en pleno rendimiento doblará la plantilla actual hasta llegar a más de 50 empleados, con la implantación de tres turnos que garanticen 22 horas de trabajo diarias.

Los responsables de la empresa no detallaron la fecha concreta en la que arrancará la producción de piezas en la planta. Según explicó el consejero delegado ahora se abre un proceso en el que los futuros clientes tienen que conocer el proceso de fabricación para homologar la planta y a partir de ahí se podrá comenzar a recoger pedidos. A lo largo de las próximas semanas, El Burgo recibirá a los responsables de las principales fabricantes de coches. Hasta ahora, las piezas de fibra de carbono para coches se han empleado sobre todo en Fórmula 1 y solo la compañía BMW ha apostado por esta tecnología. Carbures, con su nuevo proceso, permitirá a los fabricantes de automoción sustituir las piezas de metal por las de fibra no solo en coches de alta gama sino también en utilitarios y en furgonetas.