Incendio en las naves traseras de la gasolinera de Abejar

Un incendio en unas naves traseras de la gasolinera de Abejar, en el que no hubo que lamentar heridos, solo daños materiales, alarmó ayer a los habitantes de la pequeña población pinariega. El fuego comenzó sobre las 18.15 horas. Al parecer, los trabajos de soldadura en la parte posterior de la estación de servicio fue la causa del fuego que afectó de lleno a los contenedores que almacenaban productos inflamables.

No hubo daños personales ya que la zona se encuentra aislada con un aparcamiento y no fue necesario evacuar a nadie. Sin embargo, las llamas sí afectaron a los contenedores y la parte de atrás del edificio de la gasolinera donde se encuentran ubicados los baños y la cocina, según informaron fuentes del Ayuntamiento de Soria.

Un grupo de vecinos de Abejar, ayudados por la motobomba de la Mancomunidad de Pinares, fueron los primeros en intervenir con mangueras y material del Ayuntamiento para evitar que el fuego se propagase en las inmediaciones.

Según explicó el presidente de la Mancomunidad, Fidel Soria, «se vivieron momentos de nerviosismo», por la proximidad al fuego de bombonas de butano y de propano, pero sobre todo los tanques de combustible que abastecen a la estación de servicio.

Una dotación de seis bomberos del parque de la capital se desplazó hasta Abejar y se encargó de apagar el fuego que a las 20 horas se encontraba controlado, pero se quedaron hasta las 21 horas en el recinto con el objetivo de enfriar toda la zona.

Al parecer, el fuego se inició por la chispa de una soldadura en los trabajos de un edificio anexo. Las llamas alcanzaron el interior de unos contenedores que contenían material plástico e inflamables que fue lo que provocó la gran nube de humo negra que se veía a varios kilómetros de distancia.

Tras controlar el fuego, los bomberos centraron su trabajo en ir apagando las pequeñas chisperas que podrían reavivar algún foco, el uso de la cámara térmica y los trabajos de refrescar toda la zona así como comprobar estado del edificio y el tejado.

A pesar del aparatoso humo y de las llamas, gracias a la rápida intervención de los vecinos y de los bomberos no fue necesario cortar la N-234, aunque los agentes de la Guardia Civil controlaron el tráfico.