Nuevas plumas para las ‘Aves que dejan huella’

Nuevas plumas, más fuertes y mejor tratadas, si cabe. Es la segunda muda de la publicación Aves que dejan huella, de la murciana afincada en Soria Luisa Abenza. Se trata de una nueva edición ampliada de esta guía de rastros y señales de la avifauna ibérica que salió a la calle hace poco menos de un año, tema en el que la autora es experta. Abenza, miembro de Genetta Rastreo, educadora ambiental, rastreadora y formadora ambiental, se ha puesto las alas por montera y ha aumentado las fichas del libro, que en su primera edición tuvo una buena acogida.

La publicación, cuyo prólogo es es obra de la primatóloga Jane Goodall, ofrecía información de 74 especies, con 300 ilustraciones y dibujos detallados en sus casi 200 páginas. El número de aves aumenta ahora a 88 especies. «La última fue todo un reto porque ya no nos quedaba espacio y tuvimos que replantear las páginas», cuenta Luisa, explicando la razón: «Resultó irresistible incluir al águila imperial ibérica, cuando ella misma, puede que con la ayuda de algo mágico, te guía hacia sus secretos».

El nuevo libro muestra huellas pero también «bellas historias de amor y algunos otros detalles de la vida íntima de algunas aves. No se trata solo de intensificar huellas, se trata de conocerlas. Un intento de proyectar empatía», añade.

La nueva edición ampliada incrementa las especies, así como la información y datos en muchas de las fichas de la primera. «En especial los cráneos de las rapaces diurnas», aclara la autora. Además, el índice alfabético incluye le nombre común y el científico, así como una amplia galería de fotos con la consiguiente explicación.

Fue la primera incursión de la autora -al frente del centro micológico de Navaleno, en el ámbito de la escritura y, pese a las ganas y pasión que empaparon el proyecto, fue «una gran incógnita la reacción que tendría el sector naturalista hacia una publicación basada en huellas de aves». La respuesta no se hizo esperar fue positiva y, tal y como la califica la autora, «estremecedora». El número de libros que autores y editoriales suelen dejar en depósito pronto fue bajando por el interés hacia la publicación pero «no se trata solamente del número de ventas, sino del cariño con que el libro fue recibido».

Las nuevas especies que aparecen en el libro son las siguientes: cerceta pardilla, avoceta común, avefría europea, ibis eremita, buitre negro, quebrantahuesos, águila imperial, águila perdicera, abejero europeo, elanio común y autillo europeo. También el alcaudón dorsirrojo, torcecuello euroasiático, cuco común y cotorra argentina. El nuevo libro estará en la calle en breve.