Pardo contará con Luis Cuesta para su equipo de gobierno

El actual alcalde de El Burgo de Osma, Antonio Pardo, está trabajando en estos momentos en la organización del equipo de trabajo del Consistorio burgense, después de tomar posesión el pasado viernes, ante una situación insólita que ha vivido la vida municipal de la localidad en los últimos dos meses. «Me encuentro con una situación diferente, el apoyo de mis concejales de la PPSO, que fuimos elegidos por los votantes, y también el apoyo de Luis cuesta como concejal no adscrito», recordó.

Pardo, que estuvo como alcalde durante 20 años en la villa episcopal reconoció ayer que todavía está «aterrizando y conociendo la situación del Ayuntamiento» y avanzó que la próxima semana será cuando se den a conocer la formación de las comisiones informativas en el pleno de organización, el primero en el que presidirá la sesión.

Aunque todavía no ha configurado el equipo, lo que sí añadió Pardo es que Cuesta estará trabajando junto a la PPSO, porque «ha adquirido una experiencia notable en la vida municipal y me consta que se ha implicado», reconoció, a la vez que aseguró que «nos hace falta un relevo, sin romper con el pasado», explicó el líder de la PPSO burgense, quien añadió de Cuesta que «creo que es importante y beneficioso por el paso que ha dado apoyando nuestra opción».

Por eso, aunque no avanzó el lugar que ocupará en el equipo de Gobierno, sí aseguró su presencia, mientras tendió la mano tanto a Cobo como a Navas, ex alcalde y candidato del PSOE, respectivamente, aunque su situación en este caso es diferente.

«Con Miguel Cobo es una experiencia diferente», reconoció, aunque valoró que cumpliera su palabra, precisando que «a nosotros nos vale todo el mundo si quiere colaborar», aunque reconoció que el que fuera alcalde hasta el pasado 30 de junio tiene un trabajo fuera de la vida municipal. Esa misma colaboración, también se la ofreció al que fuera su rival en la elección del pasado  de junio, el portavoz socialista, Martín Navas, porque «para mi, no tienen que ser los perdedores ni nada por el estilo».

Para mí «todo el mundo es válido, incluso Martín», añadió, asegurando que «tenemos que beber de la fuente de la experiencia que han adquirido», reconoció.

Pardo también avanzó que en estos momentos es clave, realizar un trabajo al servicio del Ayuntamiento y sus vecinos y que se debe dar un trato igual a todos, abrir las puertas, ofrecer los servicios, y que hoy, más que nunca,  «tenemos que bajar ese posible estado de excitación», en referencia a las últimas semanas. Por eso el actual edil reconoce ofrecerse a un reto más complicado, apelando al «consenso y unidad», por lo que confió en que «todos vengamos a aportar ideas», destacando que el debate tenga que estar en la política y «no entre dos personas».

Pardo llega a la alcaldía en medio de una legislatura y con dos presupuestos aprobados, por lo que deberá «coger las partes positivas» y avanzó que se volverá a retomar alguno de los temas que quedaron sobre la mesa el pasado pleno del 30 de mayo, centrado en el ámbito deportivo. «Habrá que activar y reactivar, aunque con el presupuesto aprobado durante este margen económico, hay pocas posibilidades de cambio tenemos», reconoció.

Para el actual edil es importante también pensar en el futuro, por lo que apostó por atraer inversión llegada de fuera de la localidad y para ello, consideró que es vita que las posibles iniciativas empresariales se encuentren con «un Ayuntamiento estable, porque si no hay estabilidad y consenso político, nadie va a venir a invertir», reconoció.

«Uno está en la política porque cree que puede hacer cosas por sus ciudadanos y por la experiencia que tiene detrás», valoró Pardo, quien reconoció que ante la actual situación de crispación que se ha vivido en la localidad en los últimos meses, «da vértigo», aprovechando para recordar que la PPSO fue la fuerza política más notada en los comicios de mayo de 2019, aunque con los cinco concejales no lograron la mayoría absoluta y fueron desbancados por el acuerdo de gobernabilidad cada dos años entre PP (con dos concejales) y PSOE (con cuatro).