SOCIEDAD
Una 'estrella' con pasado de Vinuesa, en una subasta millonaria en Londres
La prestigiosa casa Sotheby's pone en venta un Mercedes 630-K de 1929 vinculado a Pinares a través de una única familia de propietarios, con un precio estimado que va de 750.000 a 950.000 euros
La casa de subastas RM Sotheby's, posiblemente la más prestigiosa del planeta, ofrece en su catálogo una pequeña joya con acento soriano. El próximo 6 de noviembre el mazo dictaminará en Londres por cuánto se vende un sensacional Mercedes-Benz 630-K de 1929 que ha pasado su vida entre Madrid y Vinuesa. De hecho, durante más de tres décadas estuvo dado de alta en Pinares.
El coche tiene un precio estimado de entre 750.000 y 950.000 euros más comisiones, con lo cual no sería extraño que hubiese que desembolsar más de un millón de euros para hacerse con él. Así de especial es esta pieza, que ha llevado el nombre de la localidad soriana al catálogo de Sotheby's.
Una de sus singularidades es que ha pasado sus 92 años en la misma familia, y está en estado original. Es una especie de 'cápsula del tiempo' envuelta en cuero, metal bruñido con mimo y una capota de color crema totalmente funcional.
La casa de subastas repasa una trayectoria trufada de historia. El motor de seis cilindros y compresor fue diseñado en 1926 por Ferdinand Porsche, uno de los nombres más icónicos de la historia de automóvil, que logró lanzar a "más de 100 millas por hora" (166 kilómetros por hora) a estos chasis.
En este caso se enfatiza la belleza del diseño con el que se carrozó. Lo inscribió en Madrid Felipe Castillo en 1929 y en 1934 pasó a manos de Dionisio García Llorente. La familia está muy vinculada a Vinuesa y en 1937 el vehículo se inscribió en la provincia de Soria. En plena Guerra Civil, el Mercedes-Benz 630-K encontró cierta paz en Pinares.
Allí siguió durante 34 años, siempre según la historia recopilada por Sotheby's. Entonces se volvió a inscribir en Madrid, pero siguió muy unido a Vinuesa gracias a que permaneció en manos de la misma familia, un hecho en el que insiste la casa de subastas como uno de sus grandes atractivos.
"El coche está todavía extremada y maravillosamente original, con una considerable pátina en sus acabados interiores y exteriores, incluyendo su rico tapizado en cuero negro y verde y su pintura negra. Si su capota no es original, es de una época cercana", relata el catálogo de la subasta sobre este Mercedes-Benz 630-K. Además, relata cómo ha participado en eventos europeos, y hasta hace unos años se ha utilizado con cierta asiduidad.
Los halagos son constantes, tanto a su "bella carrocería abierta", su "atractiva pátina de uso tan deseada en el mercado actual de coleccionistas de automóviles" o el ser un vehículo "fabuloso" para concursos o para "estirarle las piernas" disfrutando de nueve décadas de tradición".
Este gigante es toda una pieza de museo, pero todavía hoy es un 'cochazo. Pesa casi dos toneladas y media, pero con 140 caballos todavía podría saltar algún rádar en autopista. Mala idea por tres cuestiones. La primera y más importante, la seguridad vial. La segunda, que quizás no fuese lo recomendable para una pieza de esta edad. Y la tercera, que sus cuatro frenos de tambor evidencia que la técnica ha evolucionado mucho en casi un siglo.
Sea como fuere, es una de las estrellas (y al ser Mercedes, en sentido literal) en la subasta de Sotheby's. No es un detalle baladí, cuando, esta misma semana la casa subastó 11 obras de Picasso por 109 millones de dólares. Ese es el nivel en el que se mueve un coche muy vinculado a Vinuesa y que ahora pasea su nombre y una gran historia ante los ojos de los coleccionistas de todo el mundo.