El cine de Almazán cierra ante la falta de espectadores

El 31 de enero tuvo lugar la última proyección en los cines Calderón de Almazán, por lo menos por ahora. La empresa Proyecfilm, que se encarga de la gestión de la sala, ha comunicado al Ayuntamiento que no puede hacer frente a los costes de mantenimiento del cine ante la falta de espectadores. Ni siquiera con los ingresos de la subvención que aporta mensualmente el Consistorio salen los números. 

No obstante, la decisión no es definitiva y todavía hay margen de negociación entre el Ayuntamiento y la empresa, como así lo ha trasladado a HERALDO/DIARIO DE SORIA, el administrador de Proyecfilm, Joaquín Fuentes y el alcalde de la localidad, Jesús Cedazo. 

El principal problema: la falta de espectadores. Quizá la situación se ha agravado por la pandemia de Covid, pero la taquilla en el cine Calderón no ha funcionado como funciona en otros pueblos de Castilla y León que también gestiona la misma empresa. «Al principio cuando se abrió el cine la población se volcó, pero después cada vez había menos espectadores», explicó Fuentes, hasta que ha llegado el momento de que las pérdidas son inasumibles para la empresa, aunque el Ayuntamiento corre con  los gastos de luz y calefacción.

«Los costes de personal son de 1.600 euros al mes y la subvención municipal de 500 euros», puntualiza el responsable, quien indicó que anteriormente se vio obligado a reducir la plantilla de dos a tres trabajadores y a su vez agregó que ha resultado muy difícil encontrar trabajadores para la apertura de la sala que ofrecía  cuatro proyecciones entre sábado, domingo y lunes, con carteleras de estreno, en algunas ocasiones,  por el precio de cinco euros. 

Las proyecciones de cine en Almazán se retomaron en 2018. La iniciativa fue impulsada por el Ayuntamiento con el objetivo de acercar programación cinematográfica de estreno a los adnamantinos y también para ampliar la oferta cultural a los vecinos, dado que la sala también acoge  las representaciones teatrales de los Circuitos Escénicos de Castilla y León, que se mantiene en la actualidad y no se ve afectada por la suspensión de las proyecciones de películas. 

El alcalde, Jesús Cedazo, confirmó las razones aportadas por la empresa, de las que ya había puesto en conocimiento al Consistorio adnamantino. «La empresa no lo ve viable», dijo Cedazo, quien también subrayó la buena predisposición de la empresa y aseguró que  entre ambas partes se están buscando «fórmulas para mantener la sala, pero con tan pocos espectadores no es fácil».  Aseguró que la media de espectadores que acuden al cine en Almazán es la más baja de todas las salas que gestiona en Castilla y León. En este sentido, el responsable de la empresa aportó el dato que en la proyección de la  película Callejón de las almas perdidas, se vendieron 30 entradas.