El Cesefor sanea sus cuentas y salva unas pérdidas de 1,1 millones de euros

El Centro de Servicios y Promoción Forestal y de su Industria de Castilla y León (Cesefor) ha conseguido, tras el rescate efectuado hace cuatro años, sanear sus cuentas, tal y como puso de manifiesto ayer su gerente, Pablo Sabín que entró en 2018 cuando el centro acumulaba unas pérdidas acumuladas de 1.100.000 euros de años anteriores y cierra una cuenta de resultados con un remanente de 6.000 euros. Una línea que les marca el camino a seguir: «La estrategia para los próximos años es seguir manteniendo el mismo nivel de tensión y actividad para conseguir resultados positivos que se traduzcan en reservas económicas que nos permitan afrontar momentos difíciles, que pueden venir, y realizar proyectos estratégicos con financiación propia», resumió el responsable.

No hay que olvidar que en el momento del rescate, una treintena de trabajadores corrían peligro de perder sus empleos y, sin embargo, ahora el centro cuenta con una plantilla de 60 trabajadores «con nuevos perfiles y mejorando sus capacidades», aseguró Sabín.

En definitiva, subrayó, «nos hemos quitado una importante mochila, cerramos una etapa oscura y seguimos trabajando buscando la luz».

A todo ello se suma que en las próximas fechas, el Cesefor conseguirá una mayor dimensión, tras la integración del Instituto de Biotecnología de León (Inbiotec) «cuyo proceso es largo al estar judicializado ya que hay que subrogar trabajadores, hay un edificio, equipamientos...», explicó Sabín. En este aspecto, indicó, estamos buscando proyectos para este centro y apoyos financieros para darle viabilidad. Para ello trabajamos con la Junta y con las diputaciones de León y de Soria. No hay que olvidar que esta integración «abre un abanico de posibilidades ya que hemos detectado oportunidades interesantes en términos de nuevos proyectos».

El gerente del Cesefor ofreció una rueda de prensa junto al presidente y al vicepresidente primero de la Diputación, Benito Serrano, y Jose Antonio de Miguel, respectivamente, en el marco de la firma del convenio anual entre ambos organismos que representa un aporte económico de 100.000 euros de la institución al centro forestal.

Serrano quiso destacar el trabajo realizado por Sabín y su equipo durante los últimos años al igual que De Miguel que apuntó que «el cambio de dirección fue un acierto. Han conseguido reflotar y reordenar el centro y hay que reconocer el trabajo de Pablo Sabín consiguiendo proyectos para empresas que reportan beneficios y con una cuenta de resultados extraordinaria».

El Cesefor está consiguiendo internacionalizar sus proyectos y diversificar su financiación, cada día más variada, que se sigue sustentando en el Patronato formado por la Federación de Asociaciones Forestales de Castilla y León, FAFCyLE; la Universidad de Valladolid y la Diputación Provincial de Soria. Además cuenta con el respaldo de la Junta de Castilla y León a través de la Dirección General de Patrimonio Natural y Política Forestal, y también hay que destacar el Instituto para la Competitividad Empresarial (ICE) que aunque no forma parte del Patronato, si mantiene su apoyo sostenido.

Para este 2022 Cesefor cuenta con una previsión presupuestaria de cuatro millones de euros, movilizados por los proyectos, la prestación de servicios y las asistencias técnicas a empresas privadas.

La incorporación de nuevas líneas de trabajo (como la biotecnología y la bioeconomía), así como el refuerzo y consolidación de otras ahora con un gran potencial de negocio (como la construcción con madera, o la digitalización de los procesos), colocan a este centro, según refirió Sabín al Patronato, entre los referentes nacionales en su sector, manteniendo el propósito de seguir desarrollando iniciativas que contribuyan a la dinamización socioeconómica del ámbito rural y, por tanto, a la fijación de población en estos territorios.