'El Reto de Pablo' llega a El Burgo de Osma contra el cáncer infantil

'El Reto de Pablo' llegará este jueves a El Burgo de Osma dentro de la ruta entre Zamudio y Albacete, localidad natal de la familia de Pablo, un niño que en 2015 se le diagnosticó un cáncer infantil (neuroblastoma) que cambió la vida de sus padres: José Luis y Montse y su hermano Israel.

Y entonces, buscando luchar contra el cáncer, que se apoye la investigación médica y que se demuestre que el cáncer no va a asociado a muerte surgió otra lucha: la diaria que vivieron durante más de un año esta familia cambiando su hogar manchego por Madrid primero y Barcelona después y celebrando que Pablo está curado. Por eso ahora el reto es pedalear en bicicleta de montaña para unir distintas localidades con su Albacete natal, para recaudar fondos que ayuden a investigar sobre el cáncer y devolver todo lo que ellos han recibido durante los años de enfermedad: ayuda, colaboración y esperanza.

La parada está prevista sobre las seis de la tarde en la Plaza Mayor de la villa episcopal, un poco antes llegará el equipo de ciclistas y sobre las 18:30 llegará José Luis, el padre de Pablo que tras recorrer La Rioja entrará en Soria por Santa Inés, Vinuesa y posteriormente El Burgo de Osma.

En su parada llevan cestas con dulces y comida que sortean con venta de papeletas, y con la compra de esas papeletas, la recaudación se destinará a investigación, al igual que harán el último día con la bicicleta que está recorriendo esta ruta para todos los que hayan comprado su papeleta durante este viaje.

Por eso es importante que la plaza mayor de la villa episcopal esté llena de gente para que colaboren con esta tercera edición que se tuvo que parar en 2020 y que este año se destinará a los proyectos de investigación que están abiertos en País Vasco y en la Clínica Universitaria de Navarra, contando con la ayuda de la empresa vasca Ingeteam, ha ido desarrollando rutas solidarias en las que recorre grandes distancias en bicicleta, afición que comparte con su hijo.

De hecho Pablo recorrerá los últimos 30 kilómetros y el 12 de noviembre de 2015, con solo 3 años, recibió una grave noticia: sufría cáncer, un tumor extraño que, como señaló su padre, “cuando te dicen que tu hijo tiene cáncer no escuchas esa palabra: solo escuchas muerte y afortunadamente no tiene porqué ser así” y de hecho Pablo es un ejemplo: “ha podido salir adelante después de una larga lucha con numerosos tratamientos”, entre ellos quimioterapia, radioterapia, yodo terapeútico, autotrasplante de médula, inmunoterapia y tratamientos experimentales.

Por eso este reto es “un cierre: enseñar de dónde venimos”, señala su padre y que el final es que Pablo lo ha superado” y quieren ser agradecidos, porque en 2015 el éxito de curación solo era del 30% “y tenemos la suerte de que nuestro hijo, gracias a padres que hicieron donativos para la investigación mi hijo está vivo, así que no podemos mirar para otro lado y a nuestra manera queremos ayudar”, asegura un José Luis que también destaca que para él es “reconfortante” este reto de Pablo “que nos ha cambiado la vida” y que surgió gracias a una beca de GAES en 2017 para hacer realidad un sueño deportivo y que fueron los primeros 3.500 euros de unos fondos que hoy han conseguido recaudar más de 122.000 euros para investigación.

Así a golpe de pedal, un non stop que le llevará a recorrer 1.100 kilómetros en 80 horas para lograr que el reto de Pablo también sea que otros niños enfermos puedan lograr su sueño y volver a pedalear.