Polémica en Monteagudo. Más de 100 artistas protestan contra las macrogranjas y vacían de obras el Castillo Museo
Los opositores a estas explotaciones ganaderas dicen que va en contra de su trabajo para convertir el municipio en epicentro de arte y punto de atracción turística, y reclaman el derecho a la información y consulta
Plaza de Monteagudo de las Vicarías y entrada al Castillo Museo.- HDS
Más de 100 artistas y poetas, aglutinados en la asociación Armazón, han lanzado un manifiesto en contra de la ampliación e instalación de granjas porcinas en Monteagudo de las Vicarías, al tener conocimiento de tres proyectos al respecto (la ampliación de una explotación ya existente, la llegada de otra nueva y una tercera en perspectiva, según apuntan). Armazon junto con la galería AGA no se quedan en la protesta: de momento, han vaciado de exposiciones de arte contemporáneo el Castillo-Museo de Monteagudo y suspendido temporalmente la actividad artística "en tanto en cuanto no se resuelva la situación", amenazan.
Este colectivo se opone a lo que califica de "implantación absolutamente invasiva de macrogranjas de cerdos (...) por ser incompatible con el proyecto de turismo cultural que estamos desarrollando", apuntan. Armazón, presidida por Margarita Asuar, recuerda que en los dos últimos años han expuesto en el municipio más de 1.200 obras de arte y la llegada de 1.000 visitantes mensuales a Monteagudo, según un comunicado de prensa.
Los opositores sostienen que estas macrogranjas "se están instalando en pleno territorio Zepa, protegido para el paso de aves y que ahora puede verse deteriorado", alertando que la actividad puede ser muy nociva para pájaros como la ganga ortega, ave de secano en peligro de extinción que habita nuestras tierras. Además, afirman que las macrogranjas "no crean apenas empleo directo, un par de puestos de trabajo, como ya hemos comprobado en Monteagudo".
La citada nota añade que las macrogranjas lejos de ayudar a la repoblación "aceleran la despoblación".
"Sabemos que lo que se está decidiendo por parte del Ayuntamiento puede abocar a Monteagudo a convertirse en unos pocos años en un erial del que vivan, en medio de un ambiente polucionado y tóxico, los pocos que se beneficien de esta actividad insalubre", agregan.
Los opositores a la ampliación e instalación de granjas en Monteagudo creen que ello "es incompatible y contradictorio con el proyecto que con tanta ilusión pusimos en marcha", esto es, lo que definen como un modelo de "economía naranja", basado en la producción, exposición y difusión de arte contemporáneo en el marco del patrimonio histórico del pueblo, así como con su objetivo de que Monteagudo llegue a ser epicentro de arte y polo de atracción de turismo.
La asociación critica que el proceso administrativo para estas instalaciones "se está realizando sin ninguna consulta o información expresa a los afectados directos, a aquellos que invertimos y trabajamos en nuevos sectores económicos en Monteagudo", apostilla.
De igual forma, los denunciantes se quejan de que el alcalde, Carlos González, "nunca" les habló de lo que califican como "realidad que se tejía a nuestras espaldas, mientras se pregonaba desde todos los foros el brillante futuro cultural y turístico del pueblo". Y dejan claro que Monteagudo no podrá tener una marca de calidad artística y turística con 50.000 cerdos al año.
Así, los opositores suspenden todas las actividades artísticas y de promoción turística del pueblo "hasta que el derecho a la información, consulta y respeto a los intereses de los afectados, como es nuestro caso, se restablezca", concluyen.