Unos 500 vecinos de la zona de Fuentearmegil piden una moratoria para la macrogranja de cerdos
Preocupación por la reciente aprobación de la Confederación que permite captar agua
Cientos de personas participaron este sábado en Fuentearmegil (Soria) en una protesta contra la petición para instalar una granja de 4.660 cerdos a dos kilómetros de la localidad. A juicio de los manifestantes, la posibilidad de que se produzca contaminación del agua en una zona muy permeable es uno de los argumentos para parar el proyecto. Estas son las fotos de la manifestación.
Unos 500 vecinos de la comarca de Fuentearmegil se manifestaron ayer en la localidad contra la macrogranja que se pretende construir en la localidad, con carteles y reivindicaciones en que apelaban al desarrollo sostenible, al adecuada gestión de agua, evitar contaminación de suelos por nitritos y apoyar un desarrollo rural sostenible, para todos, «el interés común tiene que prevalecer ante un interés general», destacaban los organizadores.
Según estos manifestantes, la protesta buscaba «reclamar a las autoridades una moratoria» ante lo que consideran una contaminación de acuíferos, con un tipo de negocios que aseguran «no son buenos para nuestro entorno», como explicó Chari Ortega.
«Se están contaminando acuíferos y se siguen autorizando», lamentó Ortega, quien explicó que además de que se ubique a dos kilómetros de Fuentearmegil o a cinco metros de Villálvaro el problema radica en un suelo muy permeable, donde es muy fácil «la contaminación de acuíferos».
«El interés común tiene que prevalecer ante un interés personal», aseguró Soledad Albitre quien aseguró es preciso «proteger nuestro medio ambiente» porque «han vendido algo que es muy fácil de conseguir y están equivocados», añadiendo que «no tienen ningún respeto ante lo que los demás tenemos que decidir».
De hecho Albitre criticó que únicamente se generen dos puestos de trabajo en una granja que se supone contará con 4.660 cabezas, aunque se mostró sorprendida ante el hecho de que la CHD haya concedido más de 25.000 litros de captación de agua (casi el doble de los 13.000 que según Albitre habían solicitado), lo que hace suponer que podría «haber una ampliación y no ser 4.660 sino el doble», lamentó.
Esta vecina de Villálvaro también cuestionó el futuro de otras posibles iniciativas agrícolas o ganaderas, porque «no va a dar agua a nadie y anula el poder poner otras explotaciones», lamentó.
Junto a ellas también estuvo Antonio Sastre, catedrático de la Universidad de Alcalá de Henares de Hidrología, quien lamentó que Soria venda naturaleza y después permita este tipo de industrias que suponen una contaminación por nitritos del doble de lo permitido y con un claro «componente cancerígeno», por lo que añadió que «no se comprende que no se le ponga el límite y el coto».
Para este profesor, la solución es la ganadería extensiva y no «la industria de la carne», como calificó a este tipo de explotaciones donde la calidad del animal le impide, según él, incluso andar y se tiene que recurrir a antibióticos, con la consecuencia que estos fármacos tienen «para los cerdos y la fauna», así como para la caza o los propios humanos cuando están en contacto con el agua o el suelo. Los vecinos de la comarca realizaron esta manifestación pacífica entre el frontón y el Consistorio de Fuentearmegil, donde leyeron su manifiesto y los más jóvenes recitaron un poema reivindicativo.