EMPRESA
Biolvegas comienza la inyección de biometano en la red de gas natural de Soria
Es la sexta instalación de estas características en España diseñada para tal fin
El Grupo Nortegas, a través de su filial Nortegas Green Energy Solutions, junto a Biovec, Bioenergética de Navarra, el resto de los socios fundadores de Biolvegas y la empresa Oleofat, ha realizado la primera inyección en red de biometano proveniente de la planta de biogás ubicada en el municipio de Ólvega.
La planta ha comenzado la inyección en continuo de biometano a la red de distribución de gas, tras un proceso de ‘upgrading’ que purifica el biogás generado por los residuos agroganaderos y agroalimentarios tratados, obteniendo de esta forma una solución 100% renovable y equivalente e intercambiable con el gas natural fósil, utilizando las infraestructuras actuales gasistas, que facilitan la maximización del aprovechamiento energético del biometano generado, así como la universalización de su consumo, haciendo disponible este gas renovable a los consumidores actuales del mercado de gas natural, según explicó la firma en un comunicado.
El proyecto tiene capacidad para producir 30 GWh anuales de biometano hoy, capacidad que actualmente se encuentra en ampliación, lo que equivale al consumo anual de gas natural de 8.100 hogares, y que conseguirá una reducción de 30.000 toneladas de CO2 anuales, facilitando una solución óptima a la gestión de los residuos en un contexto de economía circular.
Se trata de la sexta planta de biometano construida que actualmente inyecta biometano en la red de distribución de gas en España, la primera diseñada desde inicio para tal fin y la segunda en volumen de producción de biometano por medio de la valorización de residuos. En concreto, se valorizarán anualmente unas 15.000 toneladas de deyecciones de ganado porcino, vacuno y avícola y unas 35.000 toneladas de residuos agroalimentarios, residuos industriales y aceites residuales.
Adicionalmente, el proyecto apuesta también por la ampliación del ciclo de vida de los residuos, optimizando al máximo su gestión. No solo valoriza y aprovecha al máximo la capacidad de generación de energía de los mismos, sino que la materia resultante del proceso se reutiliza también como abono aplicado a suelo, facilitando una solución orgánica a las necesidades del sector agrario local, generando por tanto una nueva solución de circularidad para el entorno.
En este sentido, el interés común de todas las compañías que forman parte del proyecto por los gases renovables y la economía circular ha facilitado la puesta en marcha de esta planta, que ha supuesto una inversión inicial de alrededor de 6 millones de euros.
«Un proyecto sólido que deja una huella positiva a todos los niveles», explica el consorcio que promueve el proyecto.