La Trashumancia de Ágreda, en fotos

Ágreda celebró este sábado la VII edición de su jornada de la Trashumancia con la participación de 31 caballistas, tal y como confirmó el concejal de Festejos de la localidad, Francisco Javier García. Una cifra «baja respecto a otras ediciones», matizó por lo que «habrá que estudiar qué ha pasado». No en vano, el año pasado «fueron entre 60 y 70 los participantes».

Números aparte, todos los asistentes estaban disfrutando de una jornada que contó con un amplio abanico de actos para el disfrute de los vecinos de la comarca y visitantes de todas las edades. Esta fiesta de la Trashumancia se celebró por vez primera en 2016, de manera experimental y «como todo salió bien se decidió consolidar», como uno de los actos previos a las fiestas de San Miguel, que se celebrarán la próxima semana, en los que los encierros y los actos taurinos copan el programa de actos.

A las 9.00 horas se abrió el plazo para la inscripción de los caballistas en la plaza de Valverde de Ágreda con un almuerzo en las escuelas. A las 10.30 horas tuvo lugar el pistoletazo de salida para el comienzo de la Trashumancia en la plaza de Valverde de Ágreda hasta llegar a los corrales de Puente Caño salvando los cerca de ocho kilómetros que separan ambas localidades. En torno a las 13.30 horas se celebró un encierro de las reses por la calle Sebastián Logroño. Se dejaron los caballos en la plaza de toros y se realizaron viajes a Valverde de Ágreda en van para recoger los coches. Tras el vermú, que estaba previsto en torno a las 14.00 horas, se iba a celebrar una comida de hermandad (15.00 horas) en el salón del centro cívico incluyendo la rifa de un jamón.

Ya por la tarde, sobre las 18.00 horas aguardaba la celebración de la trashumancia urbana por la calle Sebastián Logroño. Para las 19.00 horas el programa recogía la actuación Dúo de Paso en el centro cívico y la celebración de un gran bingo en el descanso. A las 23.00 horas, discomóvil Festisoria en el mismo lugar para completar la jornada.