Brote de gastroenteritis
Tarazona estudia acciones legales contra el causante de contaminar el Queiles a su paso por Soria
Los casos de gastroenteritis vuelven a niveles normales y se espera que se pueda utilizar agua del grifo en una semana
El Ayuntamiento de Tarazona, de Zaragoza, no descarta emprender medidas legales contra el causante de la denominada 'crisis del protozoo' que provocó más de 500 casos de gastroenteritis para una población de 10.000 habitantes y la incomodidad de no poder beber agua del grifo durante al menos mes y medio.
De momento, se desconoce el origen del foco de la contaminación, pero sí se sabe que en el nacimiento del río Queiles, en Vozmediano, el agua no tiene atisbo de microorganismo y unos metros más allá, es decir, pasada la piscifactoría y los desagües de la población, hay presencia de oquistes de criptosporidiu, el protozoo que ha provocado que Tarazona, Torellas, Los Fayos y Novallas no puedan consumir agua de boca.
El alcalde de Tarazona, Antonio Jaray, afirma que no descarta “tomar medidas legales” debido a que la contaminación ha supuesto un perjuicio de salud para la población y económico para el Ayuntamiento y los empresarios, sobre todo, de la hostelería.
A pesar de pretender ser indemnizado por una posible mala praxis, reconoce que quizás nunca se encuentre el foco porque el río es “un elemento vivo” y “quizás el propio agua barra el microorganismo”, informa Ical.
Antonio Jaray cree que pronto Tarazona y las localidades que se abastecen del agua del río Queiles podrán volver a la normalidad, es decir, a poder consumir el agua del grifo con tranquilidad, ya que los análisis de esta misma semana evidencian niveles “admisibles”, pero se espera a que la analítica se mantenga al menos 15 días para dar luz verde al consumo del líquido elemento.
En cuanto a la solución, el regidor turiasoniense apunta a que se pretende captar agua directa desde nacimiento, es decir, incorporar una tubería a la red y adicionalmente incorporar un sistema de luz ultravioleta a la depuradora. “La solución definitiva es captar agua desde el propio nacimiento porque, si no, tenemos siete kilómetros de río abierto con el riesgo de que se vuelva a producir otro vertido”, explica.
Ambas soluciones podrían tardar un escaso margen de tiempo de ejecución, sin embargo, sí requerirán de permisos del Ministerio de Transición Ecológica y de la Confederación Hidrográfica del Ebro, ya que afecta a dos comunidades autónomas diferentes: Aragón y Castilla y León y se necesita de la coordinación de la Administración General del Estado.
El Ayuntamiento de Tarazona ha repartido más de 60.000 litros de agua embotellada y otros tantos a través de depósitos. Además, adicionalmente ha modificado las ordenanzas para compensar entre los usuarios el no uso de las piscinas.
Jaray reconoce que el mayor perjuicio económico lo han soportado los hosteleros que han visto como las reservas en hoteles se cancelaban y han tenido que tomar medidas como la compra de hielo para prestar servicio.
Por otro lado, Tarazona, a la que une un estrecho vínculo con los pueblos del Moncayo soriano, mantiene un litigio abierto contra Ágreda y Ólvega por la calidad del agua del río Val, ya que se ha detectado agua contaminada o con exceso de materia orgánica.
El regidor explica que algunos pueblos de la ribera de Navarra y Tarazona se abastecen, por un lado, del río Queiles (para boca) y del agua del embalse del Val-también de origen soriano- que se utiliza para agua de riego, fundamentalmente.
“Se han encontrado o contaminantes o exceso de materia orgánica en ese agua, del embalse que recibe las aportaciones de la depuradora que comparten Ágreda y Ólvega. Hemos interpuesto una denuncia hace año y medio por la contaminación del agua”, remarca.
A estudio en Europa
El brote de gastroenteritis de Tarazona, con más de 500 afectados, ha sido uno de los mayores que se ha registrado en España como como consecuencia de un patógeno. Es, incluso, uno de los mayores de Europa.
El causante es un protozoo, el ooquistes crypstosporidium, tiene "una distribución global en el mundo", según el científico Juan José Badiola, experto, además, en sanidad animal, quien afirma que infecta habitualmente a animales rumiantes, como son las ovejas, las vacas o las cabras, sobre todo en ejemplares recién nacidos. "Aparte de gastroenteritis, provoca muchas muertes. Es un parásito muy simple, unicelular y que tiene como objetivo la colonización de las células del intestino delgado", señala.
Badiola asegura que ha visto este protozoo "centenares de veces". Sin embargo, admite que es "infrecuente" que se contagie a los humanos y sí se describe en animales rumiantes, como son las ovejas, las vacas o las cabras, corzos y, sobre todo, en ejemplares recién nacidos. "Además, se ha descrito en ratas, perros, gato, reptiles y últimamente en los peces. Son muy resistentes porque se rodean en una capsula. Al cloro en mucha cantidad sí es susceptible pero la hipercloración del agua no es apta para el consumo”, destaca a Ical.
La invasión de este patógeno causa gastroenteritis que pueden ser grave en personas inmunodepresivas. Badiola asegura que la Unión Europea estudia ya éste y otros brotes, de menor magnitud, que se han producido en Europa porque cada vez se detectan con más frecuencia, y agrega que la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria hará un informe con las recomendaciones oportunas sobre cómo actuar.
El río Queiles nace en Vozmediano, donde surge el agua a borbotones de una sima del Moncayo, manantial que constituye el segundo con más flujo de Europa con un caudal de 1.500 litros de agua por segundo.