Diputación
El PSOE rechaza las bases de Planes por ser rígidas para contratar obras en Soria
La oposición propone cambios para facilitar la tramitación a los ayuntamientos y además reclama un incremento del presupuesto anual para las obras
El PSOE de la Diputación de Soria rechaza las bases de Planes Provinciales para el reparto de obras del próximo año por ser demasiado rígidas para los ayuntamientos para contratar las obras.
En la comisión informativa las votaron en contra y hoy también lo harán en el pleno, si el equipo de Gobierno no acepta sus propuestas, así lo anunció la portavoz, Esther Pérez.
Además, de dotar de mayor flexibilidad de las normas solicitan un incremento del presupuesto, por encima de los cinco millones de euros anuales.
«Tenemos que darle una vuelta a las bases», aseveró Pérez, que indicó que el PSOE concedió un voto de confianza a las bases aprobadas el año pasado. A su juicio son demasiado rígidas en los plazos que marcan a los ayuntamientos para la contratación de obras y son los consistorios más pequeños los que salen perjudicados por los porcentajes de aplicación en el reparto.
La portavoz del grupo socialista de la Diputación, Esther Pérez, aseguró ayer que el 30% de los ayuntamientos de la provincia ven comprometida su financiación para Planes de este año por la rigidez de los plazos para contratar.
En este sentido anunció que en el pleno de hoy se va a tener que aprobar una modificación, que obligaba a los consistorios a contratar antes del 1 de agosto, para que no pierdan la ayuda consignada.
Otro de los aspectos de las bases que el PSOE quiere modificar es la obligación a los pueblos menores de 100 habitantes a realizar peticiones cada dos años para que lo puedan hacerla anual. También reclaman que se elimine la obligatoriedad de contratar a los ayuntamientos cuando la obra supone un gasto por debajo de los 40.000 euros, una tramitación que también perjudica a los más pequeños que no cuentan con las mismas herramientas que los ayuntamientos grandes. Además de que se conceda más margen para cambiar de obra.
Esther Pérez realizó un balance del primer año de legislatura en el que Benito Serrano y si equipo «han suspendido en gestión», según la portavoz socialista que «ha estado marcado por la pérdida de fondos europeos, el retraso de proyectos y la escasa ejecución presupuestaria».
La portavoz fue más allá y calificó de «intolerable» la falta de transparencia en la Institución Provincial y se quejó de la manipulación de los datos, «como ocurrió en la residencia de El Royo» y de que el equipo de Gobierno no contesta a las peticiones de la oposición. En este sentido reprochó a los populares que «se dediquen a acusar los trabajadores de la casa».
La mala gestión a la que se refirió la portavoz socialista se centra tanto en los «proyectos estrella» de la Diputación como en los que forman parte del día.
Entre los primeros mencionó la paralización de las obras del aeródromo, «en el que nos hemos gastado 100.000 euros al año en seguridad nocturna», puntualizó, así como el punto de nieve Santa Inés y el circuito de aguas bravas.
En cuanto a la gestión diaria, «también se les atraganta», expresó y recordó que están pendientes las bases para las ayudas dirigidas a proyectos para evitar la contaminación de las aguas, así como los trabajos de las brigadas forestales.
«Solo actúan a capricho», manifestó Pérez, que aseguró que no se atienden las necesidades de todos los pueblos por igual y dijo que en Diputación «hay un Plan Golmayo y un Plan Garray», en referencia a los municipios de los que son alcaldes el presidente, Benito Serrano, y la vicepresidenta, María José Jiménez.