Inundaciones en viviendas al desbordarse el río en Magaña por la tormenta

La tormenta de la tarde del lunes se vivió con especial virulencia en la zona de La Rinconada (Soria) donde el agua anegó carreteras, caminos, calles, viviendas y naves agrícolas en las localidades de Castilruiz, Fuentestrún, Cigudosa, Fuentes de Magaña y Magaña. En este último pueblo es donde se registraron los mayores daños con el desbordamiento del río Montes que inundó varias viviendas del barrio de abajo, además de calles y parques.

La lluvia comenzó a media tarde y fue especialmente virulenta entre las siete y las ocho de la tarde. Se recogieron de media más de 50 litros en una hora, pero en pueblos como Castilruiz hubo 65 litros con picos de 120 litros en momentos de máximo apogeo. A esto se suma que en las horas siguientes siguió cayendo agua en toda la zona.

El agua se desplazó rápidamente por todo el barranco de la cuenca del Alhama y cortó en varios puntos la carretera autonómica SO-630 entre Magaña y Matalebreras. Arrastró ramas, troncos y una gran cantidad de piedras y lodo dejó calles, plazas y parques embarrados. 

Los mayores daños materiales se registraron en Magaña. El desbordamiento del río Montes, afluente del Alhalma, inundó el las viviendas del barrio de abajo. El agua alcanzó un metro en algunas viviendas y cocheras y arrasó un parque público donde se rompieron escolleras, vallado y papeleras, entre otros elementos.

Los alcaldes de la zona clamaron contra la falta de previsión de las administraciones a la hora de acometer las infraestructuras y también por la falta de limpieza de los cauces. 

En Magaña se acumularon ramas y troncos y taponaron el cauce lo que ocasionó el desbordamiento, «sería necesario cambiar las políticas ambientales y preocuparse más por los que viven en los pueblos», se lamentaba ayer el alcalde de Magaña, Fernando Marín, que pedía pensar más en las personas que viven en los pueblos.

Desde primera hora de la mañana, alcaldes, vecinos, empleados municipales y brigadas de carreteras de la Junta de Castilla y León y de la Diputación se afanaron para limpiar los rastros de la tormenta que dejó agua y lodo en estos pueblos sorianos.

La tormenta fue también impresionante en Castilruiz, donde los principales daños se registraron en la carretera hacia Matalebreras. El barranco de desagüe de agua se llenó rápidamente y el agua salió a la carretera, que discurre paralela. 

El alcalde, Francisco Jiménez, se quejó de la suciedad del mismo «y como ahora no se puede tocar pues nos pasa esto», explicó el regidor que agregó que episodios como el de lunes son habituales cuando las tormentas son fuertes.

Fuentestrún

Una situación similar vivieron los vecinos de Fuentestrún, donde en la entrada al casco urbano se había acumulado el lodo que arrastró la tormenta. «Las cunetas se cegaron», explicó el alcalde, Isidoro Gil, «porque las canalizaciones que se han colocado con las obras de la carretera no eran suficientes», agregó, por ese motivo el agua buscó salida también por la carretera.

En Fuentestrún, el alcalde también se quejó de las explanaciones de terreno que se han realizado para la construcción del parque fotovoltaico que, a su juicio, eso favoreció el arrastre del agua y de la tierra hacia el pueblo y hacia la carretera. 

Una situación que ya se ha sufrido en Fuentestrún hasta en tres ocasiones, se quejó el alcalde, que explicó que «el agua se mete en el pueblo y las rejillas no son suficientes».

Indicó que ayer ya se había puesto en contacto con la delegada de la Junta en Soria, con el objetivo de que se tomen soluciones, «habrá que tomar medidas», dijo, tanto en las obras del parque fotovoltaico, «porque eso no se puede quedar así», puntualizó y también sobre las obras de la carretera, «los técnicos de la Junta ya han visto lo que ha pasado», agregó. 

El alcalde de Fuentestrún indicó que ya ha hablado con el de Castilruiz para solicitar que se tomen medidas de contención para evitar grandes riadas en esta zona de la cuenca del Alhama.

Cigudosa

En otros pueblos como Fuentes de Magaña el agua inundó calles y plazas y en Cigudosa los mayores daños se registraron en los caminos, «los ha roto todos y estaban recién arreglados», manifestó el alcalde, Fausto Cabriada. El agua no llegó al pueblo y no se registraron daños en viviendas o naves agrícolas, como ha ocurrido en otros pueblos de la zona.

Ante los efectos de la tormenta, las administraciones públicas se coordinaron para la limpieza de las carreteras. La Mancomunidad de Tierras Altas se encargó de la limpieza de la carretera de Valtajeros, mientras que el personal de Vías y Obras de la Diputación y el de carreteras de la Junta de Castilla y León se encargaron de la carretera autonómica SO-630 y también prestaron apoyo a los ayuntamientos en las limpiezas de las calles y espacios públicos que se vieron afectados por las fuertes tormentas.