El Consejo de Medio Ambiente de la Junta aplaza la declaración ambiental de la granja de Cidones
Según Asden requiere más informes sobre el proyecto ubicado cerca del embalse
El Consejo de Medio Ambiente, Urbanismo y Ordenación del Territorio de la Consejería de Medio Ambiente retiró ayer del orden del día la aprobación de la Declaración de Impacto Ambiental de la granja porcina de Cidones ante la necesidad de contar con más informes, según informó Asden.
El proyecto de la explotación porcina, con una capacidad para 4.368 plazas, que se pretende construir en el entorno del embalse de la Cuerda del Pozo, cuenta con el informe favorable para la declaración de impacto ambiental del Servicio de Evaluación Ambiental de la Consejería de Medio Ambiente.
En este Consejo participa como representante de la organizaciones ambientales la Federación de Ecologistas en Acción de Castilla y León, en la cual está integrada Asden y con la que colabora y aporta alegaciones para aquellos proyectos que afectan a la provincia de Soria.
Para el proyecto de la granja de Cidones Asden iba a presentar unas escuetas alegaciones solicitando que se retirará el proyecto del orden del día, y en su caso se emitiera una Declaración de Impacto Ambiental negativa, según Asden.
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Las alegaciones se fundamentaban en la escasa calidad del estudio de impacto ambiental presentado por el promotor, a pesar de las subsanaciones que le habían exigido.
Además, la agrupación ecologista argumenta que el último informe de la Confederación Hidrográfica del Duero era del año 2019, y el proyecto se ubicaba en una Zona Protegida por el Plan Hidrológico del Duero en vigor desde el año 2023 sin que el Organismo de Cuenca haya informado al mismo.
Esta anómala situación la comunicó la asociación Asden a la Confederación el viernes 30 de agosto. Asimismo, según Asden, la documentación del proyecto y los informes emitidos puestos a disposición de los componentes del Consejo no hacía medición a que la explotación porcina se ubica dentro del Ordenación Paisajística n.º 1.2 ‘Embalse de la Cuerda del Pozo’, según establece el Plan Regional Territorial del Valle del Ebro (Decreto 10/2009).
Una cuestión jurídica y técnica de "gran importancia" que el Informe del Servicio de Evaluación Ambiental no tuvo en cuenta en su dictamen.
El Plan Hidrológico del Duero ha declarado como Zona Protegida esa zonas por estar dentro del área de influencia de una masa de agua superficial declarada de abastecimiento, de recreo y zona sensible para la captación de agua potable, lo cual supone una serie de exigencias que el proyecto, que a juicio de los ecologistas, no cumple.
Todo ello considerando la cercanía al embalse, las características del suelo, y las escorrentías de las aguas de la ubicación de la granja, sin olvidar que la cartografía oficial reconoce la presencia de un arroyo a menos de 100 metros.