Matea, la centenaria de Soria que ordeñaba y vendía la leche de la única vaca de su familia
Natural de Matamala de Almazán, vive en la residencia Fuente del Rey donde ha sido homenajeada por el centro y la Diputación Provincial
Soria tiene un nuevo centenario. Se trata de Matea Casado Garijo, a quien la Diputación, a través del Centro de Acción Social Soria Rural ha rendido homenaje. La celebración tuvo lugar este sábado en la residencia Fuente del Rey, de Soria, junto a sus familiares, residentes y trabajadores del centro.
El acto comenzó a las 11.30 horas con la celebración de una eucaristía y una vez finalizada la misma, la Diputación de Soria hizo entrega a la homenajeada de una placa conmemorativa de la efeméride y de una copia de su partida de nacimiento que tuvo lugar hace cien años en la misma localidad donde ha discurrido gran parte de su larga vida. También recibió las felicitaciones de parte de la corporación de Matamala de Almazán, en nombre de todos los vecinos del pueblo. Posteriormente la residencia invitó a los asistentes a un pequeño vino español.
La institución provincia aporta, junto con la familia, algunos rasgos de la vida de esta nueva centenaria: "Matea nació el 21 de septiembre de 1924 en Matamala de Almazán y fue la segunda hija de Francisco y Benita en una familia de cuatro hermanas y un hermano.
Matea es soltera y ha vivido en casa de sus padres. Siempre ha ayudado en los trabajos del campo y a la familia cuando lo han necesitado lo que no le impidió acudir siete años de niña a la escuela de Matamala. Es una persona fuerte físicamente y ha estado muy pocas veces enferma.
Una de sus hermanas, Teresa, era maestra y Matea le acompañaba en sus destinos todo el año escolar ya fuera en Atienza o diferentes pueblos de la provincia de Soria.
Hubo una época en que la familia tuvo una vaca lechera y Matea se encargaba junto a su padre de ordeñarla y vender la leche por Matamala.
En verano los sobrinos pasaban las vacaciones con Matea y sus padres en el pueblo, por lo que mantienen un gran recuerdo de esos días con noches cantando, jugando a las cartas o explicando anécdotas de la vida en el pueblo.
En 2013 Matea abandonó su domicilio en Matamala de Almazán para trasladarse a la Residencia Fuente del Rey de Soria, donde reside actualmente. Los primeros años ella salía y realizaba relaciones sociales fuera de la misma. Aunque su estado de salud en la actualidad es bueno, sus problemas de movilidad hacen impiden que ahora salga.