Nace Almendras del Moncayo, una iniciativa para comercializar el fruto seco de Valverde de Ágreda
El emprendedor Jesús López Cacho comercializa ya este fruto seco de forma natural por la provincia de Soria
El emprendedor de Ágreda (Soria) Jesús López Cacho ha puesto en el mercado ‘Almendras del Moncayo’, un producto ‘gourmet’ cultivado en Valverde de Ágreda, donde hay más de 700 hectáreas de almendros en producción. De momento, el agricultor vende por la comarca del Moncayo y sus alrededores el producto de forma natural. Hasta este pasado verano, él como los muchos productores de almendras de esta pedanía de Ágreda, la vendían a terceras personas, que a su vez las enviaban después a grandes distribuidoras.
Jesús López quiso sacar un mayor rendimiento a su finca de diez hectáreas de almendros y así decidió transformarlo, envasarlo y comercializar el fruto seco. “Mi objetivo es comercializar mi producción y vender entre 15.000 y 20.000 kilos anuales de almendra al natural para sacar un valor añadido porque los precios que obtenemos con la venta de almendra a terceros nos llega justo para salvar los costes de producción. Si lo coges, lo transformas y lo comercializa se doblan los rendimientos”, explica a Ical.
El agricultor prevé realizar una pequeña inversión comprando maquinaria para envasar y clasificar el producto. Afirma “no tener miedo a emprender” pero sí teme la dura competencia de los precios, ya que él no puede competir con las grandes marcas de frutos secos. “Vendo un poco más caro porque vendo almendra de una calidad superior al resto y la comercializo al natural sin tostar. La gente demanda productos saludables, libres de azúcares y de sal”, agrega.
Asimismo, defiende que el consumidor al adquirir su producto sabe de dónde procede, frente a las grandes distribuidoras que comercializan almendras de Egipto, de Estados Unidos y algunas veces de España.
Almendras del Moncayo comercializa la variedad belona, que presenta cierta resistencia a las heladas y un grano grande y de calidad. Al respecto, el agricultor afirma que en Valverde de Ágreda y en los pueblos limítrofes hay un clima más parecido al de la ribera del Ebro que al de del Duero, lo que permite cultivar productos de regadío y frutales.
Respecto a los cuidados que requieren los árboles, Jesús López reconoce que la cosecha se realiza con una máquina y es “bastante fácil”, y añade que el secado, al no contar con secadoras industriales, se realiza de forma tradicional con el llamado “secado a manta”. “Es imprescindible quitarle la humedad para comercializar el fruto. El árbol requiere los cuidados típicos de poda, labrar, riego y sulfatar”, cuenta.
Antiguamente los almendros en Valverde de Ágreda se encontraban en los orillos de las fincas de cereal, pero desde hace 30 años un grupo de vecinos decidió extender el cultivo y convertirlo en un referente en la provincia con unos 125.000 árboles de distintas variedades. En primavera son muchas las personas que se acercan hasta este pueblo limítrofe con La Rioja para ver su floración.